Siempre me he preguntado por qué la vida,
da tantas vueltas, siendo un suicida,
que sufre a causa de la más leve sobreherida,
no soporto la embestida, mi mente dolorida,
sucumbe a ti como si fueras morfina,
solo tú detienes mi caída y creas endorfina,
cuando lo necesito, eres mi más dulce medicina.
Eres la única droga que habita en mí ser...
Te necesito, te anhelo, te deseo,
consumirte es mi único propósito,
terminaré durmiendo en el suelo,
donde siempre pordioseo...
Por un poco más de tu aroma exquisito,
pues es tu cuerpo el que me da consuelo,
es mejor estar perdido en el que llegar al elíseo.
Me he vuelto adicto a ti...
Si el amor fuera una rara enfermedad,
ya estaríamos muriendo, dame más amor.
Siempre consigues darme tranquilidad,
es un trabajo agotador, desprendes vigor,
sabes cuidarme de mi vulnerabilidad,
pero es abrumador saber que el dolor...
Destruye toda huella de vivacidad,
Trato de consumirte, pero me hace mal...
Me hago dependiente a ti, y temo por verte partir,
que hago para abatir tu despedida, como puedo coexistir,
si ya no estás en mi vida, sabes que no voy a desistir,
como hago para que comprendas mi sentir, si yo por ti dejo de sufrir,
si con alguien eh vivir, que sea contigo... Lo digo sin mentir,
jamás podría omitir a alguien como tú, no quiero sonar mártir,
pero debo dejar que seas feliz, debo dejar de insistir...
Debo dejarte tranquila para que puedas seguir...
Corro a ti porque tus brazos me hacen sentir calidez,
en ellos quiere pasar toda mi vida hasta la vejez,
por tu amor mi alma recupera la lucidez,
¿Es que acaso no lo ves? Desde aquella vez...
Dejé que miraras mi idiotez para que vieras delicadez
esperando a que te embriaguez con horridez de mi extrañez,
disculpa mi inmadurez pero la malcriadez,
también es parte de estupidez.
Cuando todo llegue a su final...
Droga mía, moriré de sobredosis,
provocando en mi corazón estasis,
entrando en crisis y luego parálisis,
alucinando que estoy en un oasis,
donde estás tú, llegaré al éxtasis,
gracias a la narcosis...
Provocada por tu elixir...