De odiarnos a amarnos con inmensidad,
nuestro encuentro fue un accidente,
pero todo paso por alguna curiosidad,
yo siempre estuve de ti al pendiente,
lo nuestro se fue dando con facilidad,
ahora sé que el corazón no miente,
jure amarte para toda la eternidad
Aunque ausente, vivías en mi mente.
Pero como estar seguro del sentir,
si los sentimientos son engañosos,
pero de amar no me puedo arrepentir,
los regalos tradicionales son arcaicos,
de ello siempre preferí darte mi latir,
mis sueños y promesas, sé que amas ambos,
aún muy lejos, tu gran amor podía percibir,
y yo iría a donde estuvieses para verte sonreír.
De pronto siento que te estoy perdiendo,
que todo lo que siento está muriendo,
que todo ha sido en vano, no te miento,
sé que en tu mente surge arrepentimiento,
nos alejamos por un largo tiempo, pensando,
como es que todo fue padeciendo,
Y de nuevo te sientes sola,
perdón por no poder estar contigo,
sientes mi indiferencia, corres desconsolada,
sé que tú darías todo por estar conmigo,
y yo no entiendo por qué cambia tu mirada,
ya no estamos juntos, pero compartimos el castigo,
tal vez esta noche helada cambie esta relación desolada.
Pero todo se desmoronó, ya no quedo ni una gota de amor...
Ahora solo se podía apreciar el dolor,
y aunque nunca podre olvidar tu olor
Jamás será lo mismo hablar sin tanto clamor.
Una promesa que sigue vigente...
Espero con ansias poder verte,
espero ese momento, tenerte,
y poder decirte de frente,
que cumpliré mi promesa pendiente,
aquello que tengo que hacer antes de la muerte,
mi larga promesa que no puedo romperte,
es que llegue el día en que te bese.