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Spreen era un pequeño alfa enojon de nueve años con el sueño de ser un valiente guerrero y derrotar a los hechiceros y sus malvados aliados, que eran muchos, el estaba orgulloso de que su especie fuera aliado de los humanos, no podía esperar por d...

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Spreen era un pequeño alfa enojon de nueve años con el sueño de ser un valiente guerrero y derrotar a los hechiceros y sus malvados aliados, que eran muchos, el estaba orgulloso de que su especie fuera aliado de los humanos, no podía esperar por darles una paliza y dejar en claro quién mandaba en este lugar.

-Por fa ma ya estoy grande-se quejo el pequeño Híbrido de oso mientras hacía un pequeño puchero.

-He dicho que no spreen Dmc todavía eres muy pequeño- regaño el de pelo castaño.

-Pero si tu no está y si tu te vas yo me quedare solo >:(- respondío molesto cruzándose de brazos mientras se sentaba en el piso para seguir su berrinches.

-Sabes que tu abuelo te va a cuidar- contestó el oso mayor ya hartó de su pequeño hijo berrinchudo.

El pequeño Spreen se iba a seguir quejando pero se le ocurrió una idea que en su mente sonaba muy bien.

-Sabes que ya no quiero nada me quedaré aquí- rubius se quedó extraño pues su hijo no era de los que entendía que no era no, pero estaba aliviado de que así fuera no quería estar cinco horas discutiendo con el oso menor.

-bueno ya me debo de ir, no hagas nada malo volveré pronto- rubios se agacho a la altura de su hijo y beso sus pequeñas mejillas.

-Ma, ya te debes de ir- dijo apartando a su madre con sus manos, amaba a su mamá pero odiaba que le dieran besos o abrazos, si no fuera su mamá ya le hubiera pegado a cualquier otra persona.

Paso un rato y spreen se equipo para escaparse de casa y seguir a su madre, al llegar se oculto en donde iba el equipaje de los guerreros, spreen estaba entusiasmado por poder ver y derrotar a aquellas malvadas criaturas.

Pasaron un par de días y nadie había notado que spreen estaba con ellos comiéndose su comida, al llegar spreen bajo sigilosamente y se escondió en unos arbustos, vio como su madre se bajaba y se transformaba en un oso café y grande.

Siguió a todos hasta un pueblo no parecía que ese fuera el objetivo pero mientras veia todo a los lejos le dio hombre, su madre y los demás ya habían avanzado ignoro a su barriga y fue tras ellos.

Llego un puto donde perdió a los demás así que decidió ir por su cuenta solo se adentro en el bosque realmente era lindo aprovecho y se comió una que otra frutilla.

Iba tranquilo perro escucho gritos sonrío entusiasmado al parecer el ataque ya había empezado, pero no sabia si estaba ganado o perdiendo, corrió como loco pero...

Su madre estaba en el suelo ya en su forma humana con una gran herida que sangranba sin parar, se acercó y al lado de su madre vio a una hada ya sin vida pues no había ningún brillo en sus ojos.

-M-mami-dijo desde lejos unas pequeñas lágrimas caían de sus mejillas-MAMI-corrio hacia el cuerpo de su mamá moviendolo de un lado a otro.

-Hijo mio- rubius puso su mano en la mejilla de su hijo limpiando sus lágrimas- T-te amo p-por favor cuídate mucho y recuerda mamá t-te ama -la mano que antes acariciaba la mejilla de spreen cayó al suelo.

Rubius perdió el brillo de sus ojos spreen se rompió llorando maldiciendo a todas la criaturas que habitaban en aquel pueblo, habia perdido a la persona mas importante de su vida, aquel hombre que lo cuido y alimento durante tantos años su carozon dolia no queria perder a su mamá, apenas era un niño, ¿por que le pasaba esto...?.

-niño que haces aquí hay que irnos si no quieres que nos maten-dijo un hombre con un tono de voz enojado pero preocupado no era correcto que un niño estuviera en esos lugares más viendo aquella horrible masacre iniciada por ellos mismos.

Spreen no soltaba ni una palabra estaba mudo, sus ojos inchados de tanta llorar fue llevado a el camión con las cuerpos que pudieron rescatar para aunque sea hacerles un funeral.

El tipo que lo acompaño era un humano de pelo negro, musculoso y tenia ojos morados al igual que el, las lagrimas no dejaban de caer, aquel señor agarro el cuerpo ya sin vida de su madre tenía miedo, el tan solo pensar quedarse solo o tan siquiera ya no recibir cosquillas, besos o abrazos del mayor una parte de su vida se fue junto a la de su madre jamás se permitiría olvidar la, cobraría venganza tarde o temprano

El tipo que lo acompaño era un humano de pelo negro, musculoso y tenia ojos morados al igual que el, las lagrimas no dejaban de caer, aquel señor agarro el cuerpo ya sin vida de su madre tenía miedo, el tan solo pensar quedarse solo o tan siquiera...

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Spreen se quedó con un señor llamado vegetta se tuvo que adaptar a su nueva "familia" los únicos que le agradaban y aceptaba como familia eran sus hermanos carrera y missa, a vegetta lo veía como su maestro y muy en el fondo como una figura paterna.

No se quejaba mucho eran personas bastante amables y aun que no quisiera aveces se le escapaba un par de comentarios ofensivos hacia el señor Willy, no aceptaba que quisiera "remplazar" a su mamá aún que el sabía que esas no eran sus intenciones y a pesar de todo el lo quería sin importar nada, lo cuidaba cuando se enfermaba, le preparaba su desayuno, le daba besos en las mejillas, y aun así no le importaba que el fuera en algunas ocasiones demasiado grosero nunca le levanto la mano o discutió con el a cerca de sus decisiones jamás llego a darle preferencia a sus hijos el era una persona justa que quería a todos sus hijos por igual.

El era tan solo un niño que habia visto la muerte de su padre, su abuelo lo había abandonado tan pronto escucho sobre la muerte de su hijo, el oso menor nunca fue importante para ese viejo choto sin corazón, no pensaba ponerse triste por cosas que no valían la pena, estaba bien en lo que cabe no tenía ninguna discapacidad o emfermedad, tenía a su "familia" con el, todos los jueves el señor vegetta lo llevaba hacia la tumba de su madre para dejarle unas flores y dedicarle unas cuantas palabras contándole su día a día.

Pero había algo que nunca iba a cambiar, el dolor y la ira que sentía al recordar ese puto día donde esos miserables monstruos acabaron con su madre jamás lo perdonaría, para otros estos comprtamientos serian infantiles pero para spreen era lo justo, y no descansaria hasta lograr su objetivo el seria el mas fuerte de todos, pobre spreen si supiera que esos actos no son más que debilidad.

Desde ese día juro vengar a su madre, no la iba a decepcionar decidió enfocarse en entrenar para cuando llegara el día acabar con todas las putas criaturas mágicas que no fueron sus aliados, a spreen se le quedó una cosa muy clara en su mente que promete no olvidar,

Las personas no son eternas ni tu amor por ellas los va a salvar de las garras de la muerte todos vamos a morir.

Las personas no son eternas ni tu amor por ellas los va a salvar de las garras de la muerte todos vamos a morir

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Ayuda siento que mis historias son muy cliché 😭😭 pero bueno eso sería todo por hoy los amo se cuidan

Siento que lo relato muy mal :(

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