En el nido de las serpientes

Divide y vencerás

Evan se ve triste y Jordan está por hacerse bolita en el piso de la entrada de las mazmorras. el silencio los inunda y Barty no sabe que hacer. Generalemnte sabe, ese es su trabajo, se ha comprometido a serle útil a Evan y verle triste le destroza. No sabe que hacer.

Una vez mász se juzga por el mal amigo que es con Jordan, que, con mirada perdida, se despide de ellos. Susurra la contraseña a una serpiente de piedra que emerge de la pared y desaparece. En cuestión de segundos tiene a Evan en sus brazos, esas muestras de afecto no son comunes en él, así que las toma, aunque sabe que están allí solo por el sentiemiento extraño de estar perdiendo el control. Barty sabe el lugar especial que Regulus tiene en su corazón, una pelea no hace mella en su relación, pero esto se siente diferente.

Esta pelea es como una cortina de humo que esconde algo más importante.

-¿Crees que deje de querer ser nuestro amigo?- Siente como el temblor de la voz de Evan derrumba las murallas de su pecho y le dice que no. Acaricia su cabello y le da un beso en la frente, le dice que todo va a estar bien y que no debe estar triste. Evan asiente, poco convencido y antes de que Barty se disponga a ir a su sala común, Evan sujeta su mano y lo atrae.

-Bart, ¿Qué pasó allí?- parece que llora y se le estruja el pecho-¿por qué explotó así?

Él también quiere saber qué pasó allí. Le dice lo que pasó (desde su punto de vista, porque está seguro de que se le ha pasado algo) El trató de disculparse  y Regulus despotricó sobre lo egoísta que es y lo poco responsable que se porta solo porque su papá es importante. 

Mira, que quede claro que eso es asquerosamente hipócrita de su parte, "tu padre es importante" exclamó Regulus Black, el niño mimado que duerme con pijama de seda y edredones de satín. 

Tampoco es que Regulus sepa todo el rollo que se carga con su padre, pero se lo imagina, al menos eso creía Barty. Ahora ya no está tan seguro.

-Mira, Ev. No estuvo tan mal...

-¿Cómo dices? ¡Casi te arranca la cabeza!- Evan está por entrar en una crisis, Barty lo sabe por el tic en el ojo derecho que le da cuando está perdiendo el control.

-De acuerdo-Masculla-No me fue bien, pero fue culpa de él. Solo está siendo un ibécil pesado, ya se le pasará.

No se le pasó.

En menos de tres días, Regulus irá a la casa de los Potter a pasar la tarde con su hermanito Sirius, no ha regresado a la sala común a estudiar, solo se ha quedado en el dormitorio un total de 4 horas, para recoger sus cosas o dormir una siesta. No han hablado. Jordan está sumido en una extraña y jodida depresión. Evan no deja de morderse las uñas.

Barty quiere golpear a alguien y todos saben que ese alguien es su mejor amigo, Regulus Black.

Con el ceño fruncido y el humor hecho mierda, Barty se acerca amenazadoramente al suspirante y deprimido Jordan Miller.

-Muévete- Ordena.

-¿Qué?- Jordan se da el lujo de no mirarlo, siguiendo con su miseria

-Vamos a resolver este problema por las buenas o por las malas- Barty no trae nada consigo, pero luce cansado, como el resto- Vamos por Reggie

Inmediatamente, Jordan levanta la mirada y se pone de pie- ¿De veras? Creí que lo habías dado por muerto... Yo-

-Lo di por muerto, pero es obvio que ustedes no. No tengo nada que perder si solo guardo silencio y dejo que se desquite conmigo ¿no? Tal vez solo necesita eso, desquitarse con alguien.

-Pero ese es mi trabajo- Ambos están caminando, salen de la sala común en busca del tesoro perdido- ¿cuál es el plan?

-El plan es esperar a que nos deje hablar con él