En el nido de las serpientes

Música Inefable

Tuvieron la idea, en las vacaciones navideñas de segundo grado. 

Para ese entonces ninguno de ellos conocía a Barty, pero fue en esa cena previa a navidad en la que lo hicieron.

Todos los "niños", los hijos de los aristócratas, los herederos de las grandes fortunas; observaban de lejos el festín hedonista en el que los mayores se envolvían. Y con un afán por no pasar nunca debapercibido, Barty se escabulló por el salón robando delicias turcas de todas las mesas.

Evan observaba al muchacho con atención, sus dedos llenos de azúcar glass, comiendo a hurtadillas las golosinas. Bastante gracioso. Barty sintió el peso de sus ojos sobre él y con esas pesatñas largas que enmarcan sus lindos ojos grises, le regresó el gesto examinador; extendió la mano ofreciendo un dulce. 

Ambos comieron el botín y poco después Orión Black, su esposa y sus dos herederos hicieron acto de presencia. 

Cuando los dulces se terminaron Barty se aventuró a buscar más y en un movimiento descuidado, hizo a un hombre tropezar sobre una dama recién presentada en sociedad. El padre de la muchacha se sintió ofendidísimo y ambos señores se dispusieron a pelear un duelo.

Que curioso, ¿no?

Barty logró escabullirse de la escena y todos los jovenes observaban el bullicio. Con un hechizo, las mesas abrieron espacio para permitir el movimiento del duelo y al rededor, las damas y caballeros observaban. Solo los más atentos notaron, como, de manera muy discerta, el público hacía apuestas.

Entre licor de cereza rebajado y champange rosa muy fino. Evan Rosier le presenta a Regulus Black a Bartemius Crouch Jr. 

Cuando el festín terminó y el duelo tuvo un ganador (ninguno recuerda quien fue) Barty se despide de todos con un:

Esperemos que se repita. 

Tras intercambiar correspondencia por la siguiente semana, los chicos deciden repetirlo. Bajo sus propias reglas, en su propio ambiente.

Al inicio tuvo todo su complicación, en priemera instancia ¿Quién asistiría a una fiesta organizada por alumnos de segundo? en caso de tener una recepción ¿En dónde sería?

El primer problema lo resolvió Evan, decidiendo que deberían vestir con máscaras, evitando aluciones a alguna pertenencia de casas y enviando invitaciones anónimas.

El segundo lo resolvió Barty, quien sugirió realizar las reuniones invocando la sala de menesteres. 

Tomó poco más de un mes y tuvieron que meter al plan (a regañadientes) a Jordan Miller; que resultó ser basatnte bueno en pociones. Precisó no solo la dormidera para mantener a los profesores lejos, sino una vía de administración gaseosa, para que, en vez de colarla en comida o bebidas, fuera más que suficiente respirar.

Pandora los descubrió a mediados del tercer año, cuando planeaban la organización de la quinta reunión. 

Ella sugirió algunas reglas para los duelos y una que otra adición al espectáculo, su contribución más importante: Un recetario de bebidas, peligrosas, si, pero baratas y con ingredientes fáciles de conseguir.

Desde entonces solo han evolucionado. Jugando con temáticas y cambiando las reglas de vez en cuando.

Para cuando se dieron cuenta, las reuniones no tenían fines de lucro. Comenzaron a gastar sus ahorros en decoradores, bebidas, orquestas y un montón de lujos que ciertamente habían aprendido de sus padres.

Procuraban que los asistentes fueran de la misma esfera, al igual que su jefe de casa, eran muy selectivos pero según Jordan: Puede entrar toda la sala común de Hufflepufff, pero nada de leones rondando.