[ ꜰ ɪ ɴ ᴀ ʟ ɪ ᴢ ᴀ ᴅ ᴀ ]
Kang T/n es una aclamada jugadora de baloncesto de la liga europea en Londres hasta que es elegida para jugar en la WNBA, con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en New York sin saber que un encontronazo con una mo...
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Jihyo se acercó a ella para besarla pero T/n se alejó dejando a la morena confundida - ¿T/n?
- Ya puedes ir a buscar a cualquier otra para besar tranquila – dijo T/n caminando hacia el coche. Caminó unos metros y se dio vuelta para agregar- Cuando termines sólo tienes que silbar porque yo ya te pertenezco. Puedes hacer lo que quieras conmigo me tienes en la palma de tu mano – seguí caminando.
Jihyo se apuró para alcanzar a la azabache – ven acá idiota – le dijo cariñosamente mientras agarraba su brazo para traerla hacia ella – yo sólo beso a jugadoras de básquet, pelinegras azabaches, bajitas y con un ego enorme – jugaba la morena.
- Yo soy de cabello azabache– dijo T/n y Jihyo asintió. - También juego al básquet –afirmo la deportista.
- Y muy bien dicen – agrega la fotógrafa haciendo sonreír a la otra chica.
- Y también soy bajita – se media con su mano.
- No es que tenga un problema con eso – de paso Jihyo aclaraba.
- Mmmm pero me falta el ego, bueno supongo que será alguna otra – T/n se encogió de hombros – Nos vemos luego entonces – trató de irse y digo tratado porque al primer paso que intentó dar, Jihyo el rodeo con sus brazos nuevamente.
Se miraron, se sonrieron, se miraron, se sonrieron… se besaron. A diferencia de los anteriores besos, este no lo inició ninguna, fue sincronizado, mutuo, fue… fue perfecto, tan perfecto que quien hubiera pasado en ese momento por ese lugar no hubiera visto dos personas besándose, hubiera visto una sola figura, no había espacio que las separan.
Llegando al departamento de Jihyo
T/n y Jihyo iban de la mano caminando por el pasillo que terminaba en el departamento de la morena.
- ¿Está mal que aun no nos hayamos despedido y yo ya este te extrañando? – le preguntó la azabache a su acompañante.
- ¿No vas a entrar conmigo? – preguntó en un tono decepcionada Jihyo agachando su cabeza
- Jihyo... mírame por favor – la morena alzó sus ojos – ¿tú sabes que va a pasar si yo entro cierto? – preguntó T/n dando por hecho la respuesta de, la pronto por ser, su chica.
- Lo sé… – afirmó- pero es que la noche fue muy corta y mañana sales para Indiana y… y no quiero que te vayas ¿no puedo atarte a la pata de mi cama ni siquiera? – bromeo la morena.
- Mmm, depende… ¿si me tiro al piso y giro sobre mi misma me rascarías mi pancita? – T/n siguió el jueguito del perro. Levantó sus manos saco su lengua e imitó a un perro jadeando.
- Por supuesto que si. Y si me miras con tus ojitos de perro mojado te rasco detrás de la oreja – Jihyo alzaba su mano y rascaba a la azabache en el lugar mencionado haciendo reír a la otra mujer – Gracias… gracias por esta noche – termino el juego Jihyo mirando a su azabache a los ojos – Gracias por todo en realidad – acarició el brazo tatuado que se había convertido en la nueva obsesión de la morena.
