Cap 24. Yeah, that's the problem.

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Había atravesado el jardín, y ahora estaba en el edificio de Cassie, caminando rápidamente hasta llegar a ella.

Quería hablar con ella.

Quería saber porqué le dio ese beso a Bill, aunque sé que fue solo en la mejilla y no se compara en lo que yo he hecho con ella.

Pero necesito saber porqué lo hizo.

De repente ya estaba frente a la habitación de Cassie, y antes de entrar, me fijé a mi alrededor para asegurarme que no estaba Roy.

Entré rápidamente sin tocar, y cerré la puerta con rapidez, para luego apoyar mi espalda en ella, soltando un suspiro.

De repente vi como Cassie se asomó de una pared, que separaba la habitación de un pasillo con su armario y con la puerta del baño.

—Tom? —preguntó.

—Hola. —dije algo seco, para luego darme la vuelta y cerrar la puerta con llave, la cual estaba insertada en la cerradura.

—Ey, ey, ey! Qué haces?! —preguntó, mientras se acercaba a pasos rápidos y fuertes, desesperada.

Terminé de cerrar la puerta y rápidamente me di la vuelta, para encontrarme a Cassie frente a mi, con las manos en su cadera.

—Tengo que hablar contigo. —dije, mientras caminaba a su escritorio, el cual estaba en la pared paralela a la puerta.

Su habitación era algo distinta a la mía.

O sea, eran las mismas medidas y había el mismo pasillo donde se encontraba el baño, pero ella tenía sus cosas de manera diferente, menos la cama.

La cama se encontraba en el medio de la habitación, con el respaldo apoyado en la pared que creaba el pasillo, había una mesa de noche al lado de su cama, y también había un pequeño sofá negro en la esquina.

En la pared de frente a la puerta, como ya sabemos, está su escritorio con un gran espejo y luces, con la ventana en el medio de la pared, y al lado del escritorio, se encontraba el soporte de su guitarra acústica y guitarra eléctrica, junto a algunas plantas altas y cables y demás.

Me apoyé en el escritorio y me crucé de brazos, sosteniendo la llave con mi mano derecha.

—Hablar sobre qué? —se cruzó de brazos.

—Bill me contó que le diste un beso. —dije molesto.

—Aamh, si, pero en la mejilla. —dijo con una sonrisa, confundida.

—Él cree que estás interesada en él. —informé con fastidiez, aún con mis brazos cruzados y mirando fijamente a Cass.

Cass abrió los ojos, sorprendida, para luego rascarse la nuca, algo nerviosa.

—De verdad él piensa eso?

—Sí. —asentí, para luego acercarme a ella, con mis brazos cruzados—Deberías bajarlo de esa nube. —dije mientras guardaba la llave en mi bolsillo y con la otra jugaba con la tira de su brazier, el cual era visible ya que llevaba una blusa corta blanca con tiras finas, permitiendo ver las tiras de su ropa interior que tenían más grosor.

—Y por qué debería? —preguntó provocativamente, apartando mi mano.

—Para no ilusionarlo. —respondí, pasando mi dedo índice por su brazo, lentamente.

—Sí... bueno, yo creo que está bien así. —agregó, sonriendo falsamente.

—Hazlo por mi... —me acerqué aún más, lo cual ella no retrocedió, y se paralizó por mi acercamiento—No quiero que mi hermanito piense que estás interesada en él, cuando los dos sabemos que no es así... —dije suavemente.

Al otro lado del jardín -Tom KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora