Epígrafe

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Podemos memorizar muchas cosas, el rostro de una persona que amaste o una imágen, pero hay una cosa que no puedes memorizar: el dolor.

Cuando nací a las pocas semanas me diagnosticaron problemas cardiovasculares, lo curioso es que los médicos se quedaron sorprendidos ya que aparentaba ser un niño saludable. Mi médico y el mejor amigo de mi padre comentó que está patología que me diagnosticaron estaba inconsciente en mi cuerpo, es decir que mi enfermedad no estaba desarrollada.

Cuando estuve en la adolescencia, era como todos, nada diferente, no había dolor, podía jugar con los de mi edad y también con los más grandes, no faltaban las personas que decían que era un joven demasiado saludable. Nadie sabía que llegando a casa tendría que tomar tres cucharadas de medicamentos, sin faltar un día del año. Nadie notaba lo que me diagnosticaron, era demasiado silencioso lo que había dentro de mí hasta un cierto tiempo.

Podría llegar hacer terminal.
Y era el causante número uno de muertes en el mundo.

¡Hola buenas! vengo a traerles está historia muy diferente del estilo de escritura de "Confesión imprevista"  sinceramente me costó escribir "Diferentes", pero aquí la tienen.

"Diferentes" [Yizhan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora