CAPÍTULO UNO

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Advertidas o no, atenganse. 

Primero narrara Sasuke porque el siempre es misterioso y aquí será un viejo sabroso, conservadito y todo bonito. jajaja. Aqui nada es predecible, como siempre jiji. 

Ahora si, a lo que venimos :p 



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SASUKE

Había un muerto a pocos centímetros de mí. Los mirones como yo, nos quedamos detrás de la cinta amarilla que la policía a puesto. No parpadean. El centro de atención era un exhibicionismo sádico de carne, la sangre escurría por doquier y cualquiera de débil estomago vomitaría a los poco minutos de verla.

Llevaba horas sin vida.

Días pidiendo ayuda.

Y años, alejada de una vida normal.

Una mujer había sido protagonista de tal fechoría. Su cuerpo estaba lleno de heridas; grandes, pequeñas que terminaron con su vida. Cada hebra de su cabello rojo se volvió más intenso con su sangre. A mis pies estaba su mano decorada con una pulsera de oro que resaltaba su blanquecina piel. Sus largos dedos tenían rasguños, las uñas postizas quebradas, como si hubiera excavado el suelo con las manos.

— Señores, aléjense y dejen que la policía haga su trabajo. No contaminen la escena. —Un oficial intento alejarnos y aunque unos hicieron caso, mis pies decidieron adherirse al suelo.

No quise seguir viendo su cabello, porque entre más lo detallaba más se volvía realidad mi sospecha. Sin duda se trataba de Karin, aun cuando su rostro era irreconocible.

La prensa llego en poco tiempo buscando la primicia para su periódico. Las luces de sus cámaras apuntaban como balas al cuerpo. Eran buitres hambrientos por escribir algo que se vendiera rápido. Había más de mil muertes de este tipo al año, así que les beneficiaba sus bolsillos. Esto era como su fuente de ingreso. Un tipo de mal necesario para otros.

— ¿Usted la conocía? —Alce la mirada y un policía me bloqueaba la vista de ella.

El recuerdo de la chica saludándome por las mañanas atravesó mi mente. Me regalaba una sonrisa amistosa. Reacomodaba su cabello detrás de su oreja dejándome ver nuevos pendientes. Sin duda eran de oro.

No vacilé mucho con mi respuesta.

— No...

¿Por qué mentí? ¿Por qué no le dije que la que conocía? Era estúpido.

Tal vez, porque así, sin muchas pruebas era más probable que archivaran el caso y quedara en el olvido.

De dónde venimos no hay sol, nuestra vida pertenece a la oscuridad. Karin lo sabia perfectamente.

Sin decir nada más decidí alejarme de ese lugar. Tome un cigarro y lo puse en mis labios mientras tomaba el encendedor. El fuego no tardó en hacer cenizas y expulse el humo que quemaba mi pecho mientras en mi mente su rostro comenzaba a ser borroso, ya no más labios rojos ni pestañas alargadas, tan solo era un manchón que con el tiempo se volvería blanco. Debía olvidarla, sus problemas no me convenían.

Saque el celular de mi bolsillo cuando recibí un mensaje.

+Agregar contacto ***

El Jefe tiene un nuevo encargo para ti.

Sasuke:

Que lo haga otro, no estoy interesado.

NO DEBERÍAS   (SasuSaku) En Emisión Donde viven las historias. Descúbrelo ahora