ELLAS A TRAVÉS DE MÍ

Capítulo #13

Arturo y Andrea discutieron en la fiesta por culpa de la zorra de Yelania. Para Arturo, Andrea era una celosa sin sentido.  Para Andrea, Arturo era un descarado, se gritaron, ella se fue llorando, él se quedó molesto y al mismo tiempo contento porque se largara. Yelania se burlaba de Andrea y ésta se moría de rabia y amor. 
Ya en la calle desandando sola se encontró con Jaime, el novio de Violeta que regresaba de casa de ésta, Violeta era su mejor amiga, él la consoló, hablaron un rato y cuando estuvo más tranquila la llevó a casa. Mientras esto ocurría Arturo sintió pena de Andrea y le pidió a la hermana de ella que también estaba en la fiesta que la buscara. No la encontraron y al otro día su hermana le cuenta a Violeta lo que le había pasado a Andrea, de cómo había discutido con Arturo y que cuando tarde regresaba de buscarla se encontró con Jaime...Violeta se extrañó porque Jaime se había ido temprano, empezó a atar cabos y sacó sus propias conclusiones. Andrea esa mañana estaba agotada de tanto sufrir y no le negó a Violeta que se encontró de regreso con su novio
Andrea y Violeta desde que se vieron por primera vez con 5 años se quisieron para siempre. Andrea y Violeta a pesar de la distancia y cualquier diferencia de criterios respecto a cómo llevan su vida se quieren para siempre. Pero ese día en plena adolescencia se rompieron cosas que al mirar al pasado no se pueden arreglar..
El día que Violeta chilló de celos, su madre vino a darle las quejas a la madre de Andrea. Más tarde en la cama Andrea le decía a su mamá
_ Qué hacer? si soy así y cuando busco ese así, descubro un manojo de emociones, una red de sentimientos, una huracán de impulsos, de reacciones impredecibles e incontrolables.
Cuando su madre se marchó del cuarto.  Andrea se atracó de aspirinas y  escapó por el cuadro habitual.

Gala sentada en el banquillo de los acusados miraba fijo a la mecanógrafa que tomaba su declaración.
_No pude desprenderme de mis adentros, mis ilusiones de entonces no me abandonan aún, cuando el hoy está distante de lo que fue. Allá se gestó la persona que soy, mi desenfado al hablar, mi necesidad de crecer, toda la atención que reclama mi inteligencia. En las tardes mis pensamientos vuelan y esperan allí las noches, los amaneceres, se recrea en los mediodías, en las escenas que protagonizan personas que ya no están y que son imágenes que retiene mi memoria pero que el corazón no reconoce más que con tristeza sosegada.
           QUISIERA EN UNA NOCHE DE VIENTOS
           CUANDO TODOS DUERMAN
           SALIR A CAMINAR SIN MIEDOS
           ESCUCHAR EL SONIDO DEL VIENTO EN LAS HOJAS DE LOS ÁRBOLES
           Y EN MIS PASOS
           LLORAR LA TRISTEZA DE MIS RECUERDOS
           EN CADA RINCÓN DE MI INFANCIA.
           
           Y EN UNA MAÑANA DE LLUVIA
           CUANDO TODOS ESTEN ENCERRADOS EN SUS CASAS
          CAMINAR BAJO EL AGUA FRÍA
          HASTA SACIARME DE TANTA SOLEDAD.
Mi crimen es conservar de ti tantos aguaceros, inviernos, noches intrigantes, poco esplendor de madrugadas, pero suficientes para prolongar mi ansiedad. Eres el sello absoluto de mi nostalgia, musa indiscutible del dolor. Mi casa vieja, mi única casa, mi vida de niña que no volverá.
Después de este discurso actuado, el tribunal la perdonó por tanta inocencia.