Cara a cara y el misterio del mar

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El cuarto y último combate, el ambiente estaba cargado de emociones, tensión, incertidumbre, misterio y éxtasis, los equipos se preparaban para el gran final, ambos equipos con todos sus miembros, otros los que pelearon en las anteriores ya estaban en óptimas condiciones para no perderse la última pelea.

Las peleadoras se prepararon para darlo todo, estaban a punto de concluir con esta guerra, no lo iban a hacer no en el mar, el cual había sido testigo de esa eterna guerra entre esas dos especies, pero se dará fin a este conflicto en tierra firme aquí hay igualdad de condiciones, dejando atrás sus ventajas y formas marinas, aquí en esta arena no hay lugar para las excusas, eso se comprobó la verdadera fuerza, eso se comprobó en los combates anteriores.

Todo está listo, ambas peleadoras están calentando, el calor que emanan era muy potente, las dos estaban sudando copiosamente, en sus respectivas esquinas no dejaban de pensar en lo que pasara después, ya habían peleado antes, pero esta vez son distintas las condiciones.

Ahora con el físico activado, y la mente fija en el objetivo se disponían a ir a la arena de una vez por todas.

- Es un honor para mí presentarles el ultimo combate de esta noche, ahora presentamos a nuestras ultimas competidoras - dijo Gordon.

- Por un lado, tenemos a la reina tirana, aquella que es la única en hacerle frente a un reino entero, siendo el más grande rival de los míticos krakens, su fuerza y belleza es notable en su andar, la más poderosa de todas las sirenas, viene por su Revancha, la conocen como Chelsea Van Der Zee, la cara de la muerte ella es ¡Nerissa!.

La sirena con una mirada de fuego entro a la arena de combate, cada paso demostraba determinación, como la reina de las sirenas, estaba demostrando su poder.

- Ahora, del otro lado de la arena, tenemos a nada más y nada menos que a una adolescente, que, a pesar de su corta edad, demuestra una gran fuerza, tanto en combate como en voluntad, fue capaz de enfrentar cara a cara y derrotar a la gran reina de las sirenas, ella es la mas joven de la dinastía kraken, y ha venido a defender toda vida en la superficie y el mar, ella una típica adolescente, ella es, ¡Ruby Gillman!.

Ruby de un gran salto entro a la arena, levantando un poco de polvo al aterrizar, una vez se disipó, Ruby mostro una cara tranquila, todos esperaban una cara muy seria pero no, la sirena al ver esto esbozo una sonrisa, estaba ante un oponente fuerte lo cual significa dos cosas, uno que podrá cumplir con su venganza y dos de que no tiene que reprimir su fuerza.

- Peleadoras en guardia, ¿listas?, ¡COMIENZEN!

El combate empezó, con una postura de boxeo, este estilo era ya típico para dar inicio, golpes volaban, pero ninguno conectaban, uno tras otro con más velocidad, los golpes de ellas no se lograban ver por la velocidad aplicada, hasta que uno que conecto, puño con puño, el impacto fue tan fuerte como el sonido de un relámpago, retrocedieron una gran distancia, inmediatamente cambiaron de estilo, ahora usarían karate, rápidos movimientos patadas y golpes rectos conectaron, y la sangre no se hizo esperar, Nerissa conecto un golpe cortante de karate, Ruby contesto con un movimiento de aikido, la sirena una vez en el suelo, Ruby arremetió con puñetazos salvajes.

La sirena bloqueaba algunos otros no pudo hacerlo, apoyándola don sus piernas, arrojo a Ruby contra una de las barreras, la sirena lanzo una patada, la kraken la esquivo y la barrera fue destruida, Ruby conecto un rodillazo del estilo muay thai, alejando a la sirena, Ruby siguió con una potente patada pero Chelsea contesto con una patada del estilo capoeira, una vez más el combate se convirtió en un baile, tan elegante, más elegante que el de Agatha y Carmen.

Al mismo tiempo conectaron una patada en la cabeza de la otra, esto fue tan potente y un gran choro de sangre broto de la nariz de Chelsea y boca de Ruby, rápidamente se tomaron de las manos haciendo un empuje y agarre tan potentes, las venas de las manos se exponían por la presión, a continuación hicieron un movimiento de sumo, derribos tan potentes que levantaban mucho polvo, librándose del agarre, estando en cuclillas se impulsaron, haciendo movimientos de lucha libre, agarres y llaves, parecían dos serpientes luchando, de un agarre en el cuello, las dos conectaron un potente cabezazo, frente con frente chocaron, retrocediendo pocos pasos atrás, el final está a punto de presentarse.

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