¿Qué sentido tenía ya todo? Pasaban los días, solo en casa, como siempre, como estaba destinado a estar. Sin nadie que llenara el vacío de su pecho. Un robot que solo se movía para alimentarse y mantener a sus mascotas. Para eso vivía... para esos perritos que ya no le sacaban una sonrisa.
Todas las noches soñaba con él, él corriendo en el parque, parándose a respirar y dedicándole una sonrisa. ¿Habían sido todas falsas? ¿Todas las muestras de afecto, todas las miradas, los nervios? No podía ser cierto...
Al abrir los ojos miraba a su lado y... no estaba. Acariciaba el espacio vacío y aspiraba, aun quedaba un poco... un poco de su fragancia, su esencia, él. Y el dolor en el pecho se hacía más grande, el nudo en la garganta le apretaba, le dolía, le costaba respirar y... lloraba. Lloraba en silencio, tan solo dejando que las lágrimas bañaran su cara y cayeran sobre las sábanas.
No había vuelto a cocinar. No de verdad. Tan solo comida precocinada, de la que meter en el horno o el microondas y que luego te la comes con el centro frío, pero no te importa, no te importa porque es alimento, comida que te metes porque el cuerpo te lo pide, porque tu cerebro no te deja morir de hambre.
Era 25 de octubre. Su cumpleaños. El cumpleaños de Jisung llegó tarde al karaoke. Recordó la cara de ilusión que se le puso a Jisung cuando entró. Ilusión... Cantó, cantaron juntos. Y en el taxi se recostó contra él, su calidez, su olor, su pelo. El pelo que apartaba de su cara cada mañana.
Sonó el teléfono.
―¿Diga?
―Minho amigo... Feliz cumpleaños ―dijo Hyunjin.
―Gracias.
―¿Cómo estás?
―Estoy.
―¿Cuándo piensas volver al gimnasio? Tus alumnos no paran de preguntar por ti.
―No lo sé...
―Escucha, ¿por qué no salimos hoy por ahí? Tomamos algo con los demás y despejas la mente.
―No me apetece.
―Minho... ¿quieres que vaya hasta allí y te lleve algo?
―No, estoy bien.
―No, no estás bien. Tienes que salir de esa casa, moverte un poco, sé que es doloroso, pero no es el fin del mundo. Lo superarás con el tiempo. Si hoy no quieres celebraremos tu cumpleaños otro día, pero lo celebraremos. Llámame cuando estés preparado ¿vale?
―Vale...
―Y cuídate. No hagas que me preocupe más.
―Sí.
Se despidieron y colgaron.
No es el fin del mundo, pero es el fin de mi mundo. Jisung..
Cogió el coche y condujo hasta su colegio. Aparcó en un lugar desde el que se veía la entrada y esperó. Los niños salieron, los padres los recogían. La entrada comenzó a despejarse. Apareció, allí estaba.
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Profesores #2 ; MinSung
RomanceMinho vive para hacer lo que más le gusta, el ninjutsu. A lo largo de su vida pasa por muchos momentos difíciles antes de conocer a su alma gemela. -, Adaptación autorizada -, Todos los créditos a la/el autor/a @NewCastlevania -, Mención a otros sh...