💔Made of honor💙// Satoru Gojo [Pausada]

Capítulo 33

El día siguiente no cambio mucho más. Salvo por qué abría una fiesta de apertura, todos vestidos de forma muy formal, Yukatas y Kimonos. Esas cosas.

Suspiré mirando la puerta, no debía de entrar ya que primero sería el reparto de los regalos, pero Satoru ya dijo que estaría con él.

Entre sin más, la sala se llenó con algo de silencio. Mire a los presentes poco y nada, pero debía de hacer mi parte.

Me acerque a la familia Utahime y los saludé cordialmente, luego fui donde la familia Gojo. Solo estaba yo, y sentí las miradas en mi.

El primero en aparecer fue Satoru, quien entró vestido con un Yukata blanco con detalles dorados y azules. Saludo a todos y se sentó a mi lado.

-Si sabía que debía ponerme está cosa,  le hubiera dicho que haríamos las cosas a mi manera- rodee los ojos.

-Ya es tarde, te aguantas- dije. Las puertas volvieron a abrirse y dieron paso a la chica. Todos nos levantamos para recibirla.

Una vez estuvimos todos, se comenzó a hacer el intercambio a lo que le di a Satoru la caja.

-No jarrón- dijo un miembro de la otra familia.

-Si, los colores representan a mi familia- esa explicación fue la más mediocre que había escuchado en mi vida.

Mire al peliblanco, no le prestaba mucha atención a lo que decían, pero aún me preguntaba las razones de aceptar una boda al estilo tradicional si no le daba la importancia necesaria.

Cuando la parte formal termino, todos nos dirigimos dónde estaba el resto de invitados a la boda. Era como una pequeña recepción. Aún así las vestimentas eran las mismas al igual que decoraciones.

-Nunca te había visto vestida así, Tn- voltee a ver a Shoko, está también vestía de ropas tradicionales.

-Bueno decir lo mismo- solté una risita y me acerque a abrazarla.

-Crei que nadie me dijo el código de vestimenta- ambas volteamos. Mei Mei vestía de forma informal. No llevaba nada tradicional.

-Lo esperaba de ti- dije riendo. Está me sonrió- ¿Cómo está Ui Ui?- pregunte.

-Se quejo del que no podía traerlo- contesto. Solté una risita por eso- ¿Y como estás?

-Bien, dentro de todo- dije sin darle mucha importancia al asunto.

-Escuche por ahí... No lo sé... Algunos rumores corren- dijo con diversión. La mire sin entender.

-¿Que rumores?- pregunte frunciendo el ceño- ¿O debo pagarte para que me digas- está soltó una risita.

-Solo por sentirme de buenas lo diré sin cobrar- dijo- al parecer varios de los invitados no te quieren aquí.

-Dime algo que no sepa- dije rodando los ojos.

-Se dice que distraes a Gojo- aquello no lo espere- desde que llegaste, el tonto casi nunca se aleja de ti, dicen que son amantes.

-Con Satoru no nos vemos desde hace más de medio año- dije frunciendo el ceño- luego nos vimos cuando me dijo de esto.

-Van a evaluarte, quieren demostrar que eres inferior a ellos y no te sabes las tradiciones antiguas de una buena esposa.

-¿Por qué querrían aquello?- pregunte sin entender. Mire a Shoko quien pensaba lo dicho.

-¿Tal vez para mostrar que Utahime es mejor candidata a esposa?- pregunto en voz alta. Miramos a la peliblanca.

- Tal vez- alzó los hombros- cosas de clanes antiguos de la hechicería y sus tradiciones absurdas.

-Deberian de prestarle atención a la verdadera novia, no a mi- dije frunciendo el ceño- ¿Satoru sabe esto?

-No que yo sepa- respondió Mei.

-Segun recuerdo, una de las veces que había escapado de clases cuando estábamos todos- mire a Shoko cuando comenzó a hablar- los clanes Kamo y Zenin no les gustaba que alguien de padres sin hechicería tuviera tanto poder maldito.

-Siempre nos depreciación a mi y a Geto- dije asintiendo.

-Si no hubiera sido por el accidente, serías de categoría especial, Tn- dijo Mei.

-Pero ya ni energía maldita tengo- dije.

- Bueno, cosa de ellos- fuimos las tres a sentarnos en nuestras respectivas mesas.

Satoru no tardó e llegar y sentarse en la silla a un lado mío. Lo mire arqueando una ceja.

-¿No tenías nada mejor que decir del jarrón?- pregunte con cierta burla. Este río un poco.

-Quedaron satisfechos en mi defensa- dijo. Bufe- oye que tanto hablaban con Shoko y...

-Gracias por haber venido todos- la voz de un hombre mayor captó la atención de todos- hoy es un día especial, con la apertura de la boda...-bla bla bla.

Mire a Satoru quien prestaba atención a medias. Lo que si supe es cuando todos comenzaron a aplaudir ante Utahime quien con nervios subía al pequeño escenario y le pasaban un shamisen.

Está ante la mirada de todos, comenzó a tocar una melodía suave. En algunas notas, el instrumento desafinaba o tocaba las cuerdas sin tanta seguridad y el sonido no sonaba. Aún así la melodía era suave y tranquila.

-Toca bien- le murmuré a Satoru. Este sonrió.

Escuché el murmullo de algunas personas. Gire la vista, me miraban a mi.

-Joven Kezume, ¿Le gustaría deleitarnos con alguna canción?- pregunto el hombre. Utahime ya se había levantado y sentado en su sitio. Ahora todos me miraban.

-Esto... Yo...- los murmullos se hicieron cada vez mayores. Entre risas escuchaba a los demás.

-Segun ni sabe que instrumento es- decían.

-Apuesto que no subiera.

-No debería ni de estar aquí- mire a Satoru, este frunció el ceño ante los comentarios.

Me había considerando muy seriamente el no tocar el instrumento. No quería arruinar las cosas, pero no me rebajaría al nivel que ellos decían que poseía.

Me levanté e hice una reverencia.

-Claro, no tengo problema alguno- me acerque al pequeño escenario apenas elevado del suelo y tome el instrumento en mis manos.

Cuando todos callaron. Solo comencé a tocar diferentes canciones tradicionales. Recordando cada cuerda y viendo cómo mis dedos iban en la dirección correcta siempre.

Ninguna falla y con una fluidez impresionante. Mire los rostros del resto notando lo impresionados que estaban.

Cuando termine, me levanté, hice una reverencia y fui a mi sitio. Satoru no apartaba su vista de mi.

-¿Quien te enseño a tocar?- pregunto. Sonreí mirándolo.

-Tu madre.