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Capítulo 16

No he podido pegar ojo, la verdad es que por más que intenté dormir se me resultó imposible. Hay algo que me inquieta, pero aún no sé que es, creo que puede ser simple ansiedad, o eso espero. Miré el reloj y me doy cuenta de que son más de las 3 de la mañana ¿De verdad tanto rato he estado despierta?

Decidí salir de mi cuarto para poder ir al patio de Zhongli a tomar algo de aire, espero que eso logre relajarme lo suficiente como para al menos poder dormir un poco. De camino paso por fuera de la habitación de Childe, su puerta está cerrada y no puedo evitar quedarme parada en el lugar mirando la puerta, una sonrisa se forma en mi rostro y continuo mi camino.

Zhongli tiene un patio bastante bonito y bien cuidado, se nota que le ha puesto mucho trabajo. El pasto es verde, hay pequeñas flores que crecen en el lugar, me siento en una banca hecha de piedra la cual se encuentra estratégicamente ubicada, esta apunta hacia un árbol que tiene Zhongli en el centro de su patio, es realmente majestuoso.

Trato de mantener mi mente en blanco para de esta forma disfrutar de la brisa nocturna, sin embargo, por algún motivo Childe no deja de estar en mi mente. Últimamente él no deja en paz mis pensamientos, se podría decir que mi cabeza se ha vuelto su segundo hogar.

Mi corazón late de forma algo acelerada mientras tengo a este pelirrojo como dueño de mis pensamientos, la verdad es que esta es una sensación nueva, la cual no me desagrada para nada.

Cada vez que estoy con él siento mucha paz, su presencia es cálida y reconfortante, me siento segura estando con él. En algún momento sin darme cuenta empecé a querer pasar cada vez más tiempo con él, la salida que tuvimos aquel día solo reforzó lo que sea que esté sucediendo conmigo. No pude evitar sonrojarme al tener esto en mente.

De repente, sentí una presencia que se sentó a mi lado, esto me sobresaltó y causó que saliera de la pequeña burbuja que había creado sin querer.

– ¿No puedes dormir? – Pregunta la voz perteneciente a la persona que se sentó a mi lado.

– No, no puedo. – Respondí, aún con el sonrojo en mis mejillas. – ¿Qué haces despierto a esta hora? –

– Yo debería preguntarte eso a ti. – Dijo Childe, su voz mostraba preocupación por mí. – ¿Hay algo que te inquieta? – Yo negué con la cabeza en respuesta.

– Al final ¿Qué era lo que quería Zhongli? – Pregunté cambiando el tema.

– Sí, con respecto a eso... – Veo como trata de encontrar las palabras. – En resumen, nos tenemos que ir temprano. Según Zhongli, nos lograron ubicar así que tenemos que ir partiendo lo más pronto posible. –

Desvíe la mirada por unos momentos frunciendo mi ceño ¿Cómo nos encontraron? Bueno, pasaría tarde o temprano, solo era cuestión de tiempo.

– ¿Por qué no me dijiste nada cuando terminaste de hablar con él? – Pregunté intrigada, ya que si es tan urgente que partamos lo mejor hubiera sido que me lo informase de inmediato.

– Era tarde ya, pensé que estarías durmiendo así que me fui directo a mi habitación. – Respondió Childe. – De cualquier forma, solo queda prepararnos para mañana. –

– Bueno, sé que mientras esté contigo todo estará bien. – Dije con sinceridad mientras bajaba brevemente la mirada. – Mientras nos tengamos el uno al otro hasta que todo se calme sé que estaremos bien. –

Mi mirada se topó con la de Childe, el sonrojo de antes volvió a mis mejillas de forma un poco más intensa, mi corazón se aceleró al quedar hipnotizada por los ojos del chico. Puedo notar un leve rubor en las mejillas de Childe

Jamás Diré Que Sí - Tartaglia Y Tú [AU] ACTUALIZACIONES LENTASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora