Its Gotta Be You

¡Detención!

La clase había pasado de lo más normal, si es que tener a Harry Styles sentado a tu lado y a Niall Horan al otro lado del salón era normal. De seguro, eran los chicos más codiciados por su belleza en todo el colegio. Bueno, Niall ya era uno y Harry no tardará en serlo. Él fue amable, de vez en cuando intercambiábamos palabras, pero nada más que eso. De seguro porque estábamos muy atentos a la clase, aunque aún así, dudo que quiera hablarme. No lo sé, cuando sea super famoso y popular en el colegio, como mucho si tengo suerte, me saludará.

El timbre de la primer interminable hora por fin sonó, todos comenzaron a salir del salón, mientras que algunos (los lentos) nos quedamos guardando y acomodando nuestras cosas para salir e ir a la siguiente clase.

—¿Asique eres de aquí?— me preguntó Harry, que ya había guardado sus cosas y seguía sentado en su silla, yo ni siquiera recordaba de su existencia, ya que estaba extrañamente concentrada en guardar mis cosas. Como si fuera una especie de distracción.

—No, en realidad, soy latinoamericana, aunque no lo parezca. Vivo aquí en Londres desde que tengo conciencia, asique me acostumbré al inglés.— el sonrío, ahora que tenía su sonrisa más cerca, me derretí.

—¿Y sabes español?— preguntó curioso.

—Algo sí, manejo los dos idiomas bastante bien.

—Dime algo en Español— pidió. ¿Que le diría? "Hola, te quiero violar" Ja, eso sería muy gracioso, pero mejor no, quizás sabía español y me lo ocultaba y yo terminaría como una verdadera psicopata. Entonces lo vi sonreír, y fue lo primero que se me ocurrió decirle.

—Tienes una linda sonrisa— dije en español, el solo sonrió.

—¿Y eso significa...?

—Hola Aria— su voz me sobresaltó ¡Su voz! Era su voz...Me giré, de seguro con una cara histórica de Aria Hastings, y lo comprobé, era Niall. Me derretí una vez más en el día, parecía un diminuto cubo de hielo siendo dirigido hacía el Sol. Hoy era el día de "Los chicos lindos saludan a Aria, y tratan de derretirla" ¿verdad? Antes de saludarlo, observé a sus espaldas por si la arpía estaba por allí, y gracias a mi fortuna, estaba apoyada en el marco de la puerta, aniquilandome con su desafiante mirada de bruja. Le sonreí, y gracias a ella, pude tomar la confianza necesaria para saludar sin tartamudear o temblar con la voz a Niall, quién me miraba sonriente.

—Niall, hola— le sonreí, y el rubio clavó sus hermosos ojos celestes en los míos desprevenidamente. Sentí como mi corazón se aceleraba a tal punto que pensé que explotaría o saldría por mi garganta a tomar un poco de aire.

—¿Como estás?— bueno, un "hola Aria" estaba bien ¿qué le habían dado a los pobres chicos para que me hablaran hoy? ¿alguien los había drogado?

—Bien, gracias ¿tú?— el chico aún sonriendo, abrió su boca para hablar, pero el rulitos lo interrumpió y me regresó a la realidad, había olvidado su presencia, es que bueno...tenía a Niall hablándome, como si fuera para menos.

—Él esta bien— respondió por el rubio. No entendía que estaba pasando ahí, cosas de ellos, supongo. Sonreí y sentí como debía salir corriendo de aquella incómoda situación.

—Creo que me iré, fue un gusto conocerte Harry.— le dije y salí de ahí tan rápido como mi madre me sacó las mantas aquella mañana.

Tuve que pasar por al lado de la estúpida de Melanie y su ejercito de tontas, todas me miraron asqueadas, creo que era eso, es que con sus rostros bañados en veinte kilos de maquillaje no lograba descifrarlo bien.

En el camino fui pensando en lo que había sucedido aquella hora, demasiado para mi. Primero, Niall me había hablado. Siempre hablábamos, claro, cuando alguna escusa se me ocurría para hacerlo, o por algún tema de biología, ya que era la única materia que compartíamos. Segundo, Harry Styles. En realidad, no estaba segura de cuándo tiempo duraría una posible amistad hasta que él se olvidara de mí cuando se haga increíblemente popular. No tenía idea.