Prologo.

45 7 0
                                    

Paseo su lengua por del interior de su mejilla, estaba furioso y cualquiera que conociera un poco de lenguaje corporal lo notaría

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Paseo su lengua por del interior de su mejilla, estaba furioso y cualquiera que conociera un poco de lenguaje corporal lo notaría. Sus ojos estaban envueltos sobre la espalda de aquel rubio que se paseaba por la sala con autoridad, aquel novato tenía presencia, tenía la voz , tenía el intelecto para llevar aquel caso. 

-— Dígame señor, ¿Qué hacía en aquel lugar donde estaba la evidencia? — la voz de aquel pecoso resonaba en el tribunal lleno de gente silenciosa. — Usted atacó a mi cliente, disparó en su pierna con un arma ilegal por unos quilos de cocaina.

— yo soy inocente... sí,  me drogo pero no soy adicto como para atacar a alguien por tal cosa.

– Señor Bang, según los reportes médicos  que obtuve con permiso de la fiscalia. Usted ha estado internado dos veces por sobredosis.

El interrogado empezó a sudar frío, bajó la mirada ante la verdad de aquellas pruebas que presentaba. El sonido ahogado de su saliva pasar con dureza por su garganta hizo eco en aquella sala donde todos casi en automático empezaron a murmurar.

— ¡orden en la corte! — sentenció el juez.

— señor Juez, si el señor Bang aquí presente sabría que estoy mintiendo, entonces no hubiera optado por la ayuda de tal bufete como el que es Seo.

— ¡objeción su señoría! — intervino por fin Seo.

Ambos abogados juntaron miradas, casi optando por matarse entre ambos, más el mayor de los dos aparto el enlace de ambos ojos, la sensación en su cuerpo era notoriamente nueva, temía lo que estaba empezando a crearse en los adentros de su fantasía.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Juicio final  | Changlix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora