Cuarto libro de una saga basada en los juegos de Pokémon creados por Game Freak. En esta historia, Hyuga, uno de los héroes que nos acompañó en Kanto y Johto, emprenderá un viaje por la región de Alola, donde conocerá nuevas amistades y enfrentará n...
¿Ustedes quieren oír un dato curioso sobre el Equipo Skull? Ese grupo de malandros está conformado por jóvenes que no lograron terminar el Reto de las Islas por, supuestamente, no ser lo suficientemente buenos.
Para poder sobrevivir en este mundo, todos aquellos que no lograron nada tuvieron que reunirse en una ubicación que me prohibieron mencionar para coexistir como una familia, bajo el mando de alguien que quiere y siempre logra demostrar que puedes ser fuerte sin Reto de las Islas ni Cristales Z. Pero eso no es algo bueno, ya que, si se lo propusiera, podría volverse un peligro para la seguridad de todos en la región.
Como sea, Hyuga, en compañía de Kukui, Sophocles y Molayne...
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Reunieron a los demás protas y a otros ciudadanos en el Parque de Malíe para darles el gran anuncio.
—¡Atención, gente de Alola! —exclamó Kukui—. ¡El día de hoy, vengo a darles las buenas nuevas! ¡Muy pronto, esta región va a tener su primera Liga Pokémon!
Todos en el público empiezan a murmurar cosas al oír eso, ya que muchos no sabían qué era eso de la liga.
—¡Lo que ustedes escucharon! ¡Aquí en Alola, se va a celebrar un campeonato para definir al Entrenador más fuerte de todos! ¡Será una liga abierta en la que cualquiera que se anime a competir, tendrá la oportunidad de hacerlo! ¡No todos los días tendrán una oportunidad así, por eso, todos aquellos que quieran participar, den un paso adelante!
Convenientemente, los únicos que jalaron fueron: Dorian, Kiawe, Mallow, Cashew, Lana, Mango, Valeria y, por último, pero no menos importante, Lillie. Sí, tal parece que todos los Ultra-Guardianes participarán en esta liga. ¿Ustedes quién creen que ganará? Lo averiguaremos en el futuro. Solo sigamos con la historia.
—En nuestros ratos libres, Gladion y yo solíamos ver Ligas Regionales por la televisión y, aunque no me gustara mucho combatir, siempre me pregunté cómo se sentiría participar en una —Lillie soltó una risa confiada—. Tal parece que al fin voy a averiguarlo.
—Pues hablando del Rey de Roma, ahora debemos buscar a Gladion para pedirle que se una a la Liga Pokémon —sugirió Dorian, pero Hyuga se negó rotundamente a la petición de su líder— ¡No! ¡Definitivamente no! La última vez que vi a Gladion, ese güerito me quiso hacer picadillo. ¿Qué nos garantiza que eso no volverá a pasar?
—Fácil. Yo mismo lo convenceré de participar. Digamos que soy muy... ¿Cómo decirlo? Persuasivo —dijo Cash con una expresión arrogante.
Al oír eso, Sophocles recordó una ocasión en que Mallow necesitaba ayuda en su restaurante y Cashew trató de convencerlo de que viniera a apoyarlos a base de súplicas.
