C-22 BAMBI

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TOBIAS

Fui en dirección al bar que tenían en esta mansión y tome una botella de cualquier cosa que fuera alcohol.

Nunca había tomado una sola gota de alcohol , pero si algo no salía como lo espero quiero tener algo con que olvidarme de eso.

Al menos solo por unas cuantas horas.

— Eso no te ayudará a nada , si es que quieres arreglar algo — solto tía Cissy entrando al bar.

— Tal vez , pero si podría quitar por un momento el dolor que se avecina — asegure abriendo la botella.

No estaba seguro de tomar , pero a mi punto de vista no tenía otra opción.

— Si ella decide quedarse , será la peor decisión que tomarás — se acercó un poco hasta mi.

Se que es la peor decisión desde que tome la botella entre mis manos.

— Se supone que tú mayor miedo es ser como el , ¿No? — pregunto y la mire confundido.

¿De dónde sabía eso?

— Es un destino que no puedo cambiar , solo lo puedo atrasar — agregue como si supiera en qué terminaré.

— Entonces intenta atrasarlo mucho tiempo más y dame la botella.

Mi dilema mental era todo un caos , no quiero ser el , pero tampoco estoy poniendo resistencia ante tomar el líquido.

— No puedo — extendí la botella hacía tia Cissy —. Lo atrasare el tiempo que pueda — asegure tomando una botella de agua.

— Verás que pronto ya no lo atrasaras más , se irá para siempre — aseguro dejando la botella en su lugar.

Asentí detrás de ella , ahora estábamos en espera de que alguno de los tres llegará aquí con noticias.

El tiempo se hizo eterno , me senté en una de las sillas de la mesa que había en ese lugar , acompañado de tía Cissy.

Mi pierna comenzó a subir y a bajar de manera descontrolada.

— No te preocupes , todo saldrá bien , deja que hablen , seguro que también tienen muchas cosas que contarse —

Tía Cissy coloco su mano en mi hombro y comenzó un pequeño masaje y mi pierna eventualmente se calmo.

Pero mi cabeza no, mi cabeza seguía pensando en todas las posibilidades.

— Están tardando mucho — asegure tomando más agua.

— Ya vienen , se paciente — pidió mirando la puerta del bar.

Mire en esa dirección y algo muy tonto se vino a mi cabeza.

— Seguro que no saben dónde estamos , iré por ellos — intenté ponerme de pie , pero tía Cissy me detuvo.

— Yo les dije donde estaríamos , no hay de que preocuparse.

La poca paciencia que le quedaba era evidente.

Haci que así volvieron a pasar los minutos que más bien parecían años.

— Creo que... — antes de terminar lo que iba a decir entraron los tres.

Pero de última entro Hermione.

Solté un suspiro al verla ahí y me puse de pie inmediatamente.

— ¿Entonces? — pregunte esperando explicaciones.

— Hermione se quedará , pero la vendré a ver la muy seguido — advirtio Harry.

Quería abrazarlo , pero es demasiado gay , así que no lo haría.

Stockholm Syndrome Donde viven las historias. Descúbrelo ahora