Capítulo 6

205 21 7
                                    

James miro a su hijo y esposa con seriedad. Los oficiales ya se habían retirado, solo habían hecho un par de preguntas a Charlus sobre la muerte de Bruno Murphy, el antiguo encargado de la fábrica de Draco Malfoy. Tanto Lily como él habían aceptado que visitaron a Murphy en su oficina esa mañana, para liquidar una deuda. Los oficiales se retiraron informándoles que posiblemente volverían a hacerles un par de preguntas.

- ¿Me pueden explicar cómo es que este hijo mío le debía tanto dinero a ese hombre? – preguntó molesto, regañando a Charlus. En ese momento llegaron Harry y Sirius con un pedazo de tarta a medio comer – ¿Y yo no estaba enterado de nada?

- Cálmate – pidió Lily –, no queríamos preocuparte James.

- Me duele ver hasta donde eres capaz de llegar - dijo aún enojado - con tal de encubrir las tonterías que comete tu hijo.

- El asunto no era tan importante – le restó importancia -, además la deuda ya fue pagada.

- De cualquier modo, me lo tuviste que haber dicho. Y tú – miro a su hijo –, mañana mismo iré a hablar con el Capitán Longbottom para que te dé un puesto allí, tal vez así comiences a ser más responsable.

James suspiró y se despidió de todos, deseándoles una buena noche. Comenzó a subir las escaleras y Sirius lo siguió detrás, comenzando a hablar mientras desaparecían en las escaleras. En cambio, Charlus salió de la casa molesto, sin siquiera despedirse.

Harry suspiró, dispuesto a ir a descansar también, pero con solo ver a su madre supo que ella tenía otra idea.

- ¿Quién es Cedric Diggory? – le preguntó con seriedad, pero Harry sabía que ella ya sabía la respuesta a eso –. Contesta, no te quedes callado.

- Estoy seguro de que ya lo sabes – le devolvió la mirada –, Charlus debió de haberte dicho todo.

- ¿Cómo nos ocultaste algo así? – reprochó – Ahora entiendo por qué dejaste a Seamus, todo por un inútil.

- Ni siquiera lo conoces – respondió molesto –. Y si no lo dije fue precisamente para evitar esto, porque te conozco y sabía que no lo aceptarías.

- Tienes razón – se cruzó de brazos y le dio una firme mirada –, no lo acepto y no permitiré que mi hijo se case con un pobre diablo que seguramente está contigo para sacar provecho de tu estúpida inocencia.

- No voy a discutir contigo mamá – termino la conversación y se dirigió hacía su habitación, pensando en darle un buen golpe a su hermano para que aprendiera a cerrar la boca.

Lily se quedó en la sala unos minutos antes de subir a su habitación, no iba a permitir que su hijo se casase con un marinero que no puede darle lo que merece. No teniendo a un pretendiente como Draco Malfoy.

..

Suspiró mientras tomaba su café. Estaba esperando a Hermione, y mientras lo hacía también pensaba en su relación con Cedric.

Hace casi una hora que se había reunido con él nuevamente, y le había pedido que hablase con su padre antes que su madre le llene la cabeza con malas ideas. Y aunque acepto, el tema de escapar salió a flote nuevamente. No terminaba de entender de donde salían tantas dudas, pero siempre se convencía de que Cedric lo quería tanto que tenía miedo a perderlo. Y Harry también, por eso aceptaba, pero había veces cuando dudaba si estaba haciendo lo correcto o no, porque la sola idea de no volver a ver a su familia lo aterraba, aunque no lo demostrase.

- Harry.

Hermione lo saludó mientras tomaba asiento a su lado, él le sonrió.

- ¿ya sabes de los rumores que comenzaron a correr? – preguntó, luego de que el mesero se retirara.

Lo que la vida me robo (Drarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora