«Blas Polidori»

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Aclaración:
•Mención de sustancias ilícitas

Córdoba, 3:15 am:

Blas:

Observo por quinta vez mi teléfono esperando un mensaje de mar ¿Donde carajos estaba a esta hora? No tenía la menor idea de ello, recién despertaba y me lleve la linda sorpresa de que estaba completamente solo en el departamento, estaba preocupado por la pelinegra, siempre tenía la costumbre de irse sin avisar y me dejaba como un pelotudo preocupado por ella toda la noche

Envío otro mensaje esperando una respuesta, pero como las anteriores veces no obtenía nada por su parte.

Mar♡

Che flaca, ¿te llevo un perro en la boca?

Mariana, son más de las tres y no andas en casa

Perfecto, ahora mi siquiera llegaban mis mensajes, me tiene que estar jodiendo, calma Blas, no es siquiera tu novia, no podes reclamar nada

Bufó en frustración, no podía hacer una escena de celos, para ella era un buen amigo y nada más que eso, mientras yo estaba como un tonto detrás de ella

Un sonido de llaves llamo mi atención, me levanto suavemente de la cama para dirigirme hacia el living, observó a mar tirada en el suelo, claramente ebria y a su lado Anto, saludo cortésmente y ella imita mi acción para luego hablar.

—Se le fue un poco la cabeza con los fernet— informó la rubia y asentí lentamente hacia ella.

Siempre Mariana ebria, ya no era una sorpresa para mi

—¿Esta vez no rompió algo?— ella asiente y paso mi mano por mi cara, esto era el colmo.

—Tranqui flaco, yo pagué todo— comento restándole importancia.

Doy un asentimiento.

—Yo te lo repongo Anto ¿Cuanto fue?

Ella hace una seña y niega

—Na que va, no tenes nada que pagarme vos, lo hago porque le tengo cariño a la flaca, nada más.

Se despide mientras cierra la puerta a sus espaldas, tomo con cuidado a la chica en en suelo y me dirijo a su habitación, apestaba a alcohol, y otras cosas que no me animaba a mencionar, ella se remueve mientras susurra incoherencias, estaba bastante familiarizado con esta versión de mar, cada fin de semana se iba a algún boliche y volvía echa paté

—Blas— escucho atento mi nombre salir de manera arrastrada de sus labio, como clara muestra de su estado.
—Sos un tarado¿Lo sabés no?— y a eso se debía?

La miro extrañado¿Había perdido la cabeza? Na, a lo mejor era el fernet y la droga lo que la hacían decir esa tontería.

—Mar, dormite, estas muy ebria— ella bufó.

— Estoy re bien, mira, puedo hacer un cuatro— comento mientras mostraba cuatro de sus dedos.

Estaba seguro de que no era así, pero lo dejaría pasar

—Sabes, estoy re al pedo por vo'— la observo extrañado¿Que culpa tenía de su estado? No tengo ni puta idea.

—Flaca, ¿Que decís?— indague con curiosidad, ella niega mientras cierra lentamente los ojos.

𝐎.𝐒 «𝐂𝐚𝐬𝐭 𝐝𝐞 𝐋𝐒𝐃𝐋𝐍»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora