DISCLAIMER: mención de trastornos, angst, lenguaje explícito y sexo. Leer bajo propia responsabilidad.
No estaba enojada, tampoco podía sentirme mal o culpable por mi pasado porque era solamente eso: mi pasado, y no lo iba a cambiar. En realidad me sentía triste por verme tan expuesta con algo que no elegí que me pasara, y con algo que decidí no mediatizar.
Mi salud mental no era algo que me diera vergüenza, de hecho estaba lejos de sentirme así pero había cosas como éstas que por el momento quería mantener personales.
¿Se acuerdan que en algún momento les conté que tenía ansiolíticos de rescate? Bueno, básicamente hubo una etapa oscura de mi vida donde mi cerebro no era capaz de producir serotonina por su cuenta, y gracias a ese desbalance químico, me habían recetado pastillas para regular mis estados de ánimo. Lisa y llanamente, tuve que seguir un tratamiento psiquiátrico y psicológico, el cual repito, no me avergonzaba, solo que a veces sentía que la gente estigmatizaba mucho los trastornos, y además yo no quería recaer en encasillarme como una persona depresiva o ansiosa porque estuve mucho tiempo de mi vida cerrada pensando y catalogándome de esa manera; como si mi total integridad se tratara de un trastorno y no valiera nada más en mi vida que eso. Como si estuviera incapacitada o simplemente como si valiera menos que el resto por pensar que yo era solo un puto diagnóstico.
Gracias a mucho esfuerzo, al tratamiento, al apoyo de mi familia y a mi gran muletilla, la música, pude salir de la mierda, pero entendía que la gente allá afuera era dañina y no quería ni siquiera entrar a mi celular para ver qué carajo estaban opinando de mi, además de que era una "groupie roba novios", por supuesto.
Si me refugié llorando entre los brazos de Patricio, era porque alguien había invadido mi privacidad, pasando un límite. Supongo que en ese momento entendí el tipo de persona que era Sofía y hasta donde podía llegar para intentar salirse con la suya, pero a mí eso no me importaba. Que me sintiera afectada porque estaban hablando de mí en televisión pública era normal, pero lo que no iba a permitir era que se metiera conmigo de esa forma porque a mí no me daba ni un poco de miedo lo que podían seguir diciendo, pese a cualquier amenaza que hubiera recibido: total, ya estaban hablando de mí.
Lo único que tenía en claro, es que conmigo no iba a joder mas.
Cuando me calme, pensé de manera racional. Ya no había nada que pudiera decir o hacer para revertir la situacion. Ahora quedaba hacerme fuerte. Agradecí el silencio de Patricio, quien se había quedado a mi lado para terminar de vestirme y contenerme. No había caído en cuenta hasta el momento que yo seguía en toalla, y que él estaba lidiando con una horrible resaca.
Nos habíamos acostado en la cama mientras esperábamos que "pasara la tormenta", aunque la realidad es que en un momento del día tuvimos que dar la cara porque los celulares explotaban a mensajes de nuestros mánagers así que a la media hora de aquel escándalo, entre videollamadas y reuniones con nuestro equipo que, parte nos acompañaba presencialmente, y la otra mitad estaba en Buenos Aires; legamos a la conclusión de actuar de dos maneras porque habían varios asuntos que aclarar. Además que las amenazas de Sofía seguían llegando pero esta vez meditando meterse con nuestras familias, empezando por filtrar nuestras direcciones, cosa esperaba se mantuviera al márgen porque el equipo de abogados estaba trabajando al respecto.
En esa reunión, principalemente escuché el punto de vista de Patricio al cual no iba a contradecir pero en mi mente formulé mil respuestas a todo lo que él estaba contando. En parte me dio ternura pero por otro lado me sentí subestimada. Me mantenía firme en la convicción de que, aún sabiendo esto, no había nada que lograría me aleje de Patricio porque mi amor por él era más grande.
Tanto su equipo como el mío nos dieron la opción de salir a hablar publicamente de lo que estaba pasando pero la verdad es que no teníamos ganas de armar un cuento grabado, ni de darle demasiada entidad; así que dejamos que ellos se encargaran de armar un comunicado en conjunto que publicarían en las redes de Vitela, dando aviso que estaban tomando acciones legales frente a las acusaciones falsas hacia mí, la divulgación de mi vida privada y las extorsiones que recibía Patricio de Sofía; mientras que en las redes de Airbag profesarían el fanatismo desde el respeto y apoyo hacia nuestra banda, compartiendo ese comunicado. Por mi parte, me dieron permiso de subir un post, donde explicaría de primera mano lo que estaba sucediendo y probablemente Patricio lo resubiría, no sabíamos muy bien todavía qué tanto íbamos a exponer pero queríamos dejar a los seguidores tranquilos y a ella asustada, el punto es que si ella quería jugar, se tenía que bancar nuestra verdad y la acción judicial. Teníamos bien en claro que ser honestos sería la mejor salida ante todo.
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HIM AND I- Patricio Sardelli (AIRBAG)
FanficEllos creían en las casualidades, que todo pasa por algo y en el momento justo. Jamás se atrevieron a cuestionar los juegos del destino y sus maniobras pero esta vez había llegado demasiado lejos. Nadie les dijo que su gran y extraño encuentro iba...