Charlie Krittin es un guapo chico de veinticuatro años, el cual está en su último año de Universidad, quien hasta el momento no le había preocupado tener una pareja formal pues ha ido de conquista en conquista.
Desde que se emparejaron, cada día ha...
El lunes por la mañana tras reunirse y saludarse, todo el grupo entraron en el aula y se sentaron en sus asientos al final de esta.
La primera clase comenzó y como siempre, los amigos a escondidas del maestro hablaron sobre sus temas favoritos, todos menos Charlie, quién estaba inmerso en sus propios pensamientos.
...-Hey amigo, ¿Te ocurre algo?-Preguntó Alan en voz baja mientras le golpeó en el hombro, al darse cuenta que este no había abierto la boca desde hacía un buen rato.
Charlie lo miró confuso tras reaccionar.
-Auch...¿Qué pasa?-susurró haciendo un gesto de dolor.
-¿Qué demonios te ocurre?- le habló este nuevamente procurando que el profesor no se percatarse.
-No es nada, solo estaba pensando
-¿Y qué es eso en que tanto piensas? -preguntó entonces Kenta.
Charlie los miró y negó con la cabeza, sacándole importancia.
-En nada, solo no dormí bien
Sus amigos fruncieron el ceño pero a pesar de que quisieron seguir preguntando no pudieron hacerlo pues el profesor les dio una advertencia.
Charlie respiró aliviado entonces pues en realidad estaba pensando en Babe para variar, el hermano menor de su mejor amigo, al cual había evitado ver en todo el fin de semana, tras negarse a quedar con su grupo pero no dejaba de volver una y otra vez a su mente.
Sabía que no podía decírselo a Alan y tampoco a ninguno de los otros chicos pues si este se enteraba seguro no solo le prohibiría acercarse a su hermano, sino que probablemente su amistad se acabaría.
Charlie conocía a su amigo muy bien y por ende conocía su temperamento, además de que a vistas de la sociedad y la ley, el perseguir a un menor tampoco estaba muy bien.
Una materia tras otra, Alan y los demás comenzaron a preocuparse pues normalmente era Charlie el más hablador y casi siempre para quejarse de todos los mimos que se hacían cuando el no tenía una conquista cerca.
Tras terminar las clases, todos fueron a la cafetería y se sentaron en la mesa de costumbre para así esperar a sus parejas, los cuales llegaron un poco más tarde.
Mientras que sus amigos se comían a besos entre charla y charla, Charlie siguió irremediablemente pensando en Babe y luego de un tiempo, no lo soportó más y acto seguido se levantó con la intención de irse.
...-Hey, ¿Y ahora a dónde vas?- le preguntó Kim abrazado a su novio.
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-Oh, bue-bueno es que...es que tengo que irme...emm....olvidé que tengo que llevar mi coche al taller
Todos lo miraron extrañados.
-¿Tu coche?, pero si has venido en él esta mañana y parecía estar bien- Alan se levantó y le tocó el hombro.
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