XXIX

7.2K 337 27
                                    

Quería ser más productiva, así que cuando Gavi se iba a entrenar yo iba a correr un poco y normalmente iba a hacer la compra. Aunque aquel día mientras corría vi a Ana caminando por la acera de en frente.

Se le veía tranquila e iba hablando con un chico a su lado. Llevaba mallas de deporte y una chaqueta abrochada, así que no podía visualizar la barriga de embarazo.

Yo seguí corriendo siguiendo el mismo recorrido que ella hacía sin intentar llamar la atención.

Llegó hasta un centro sanitario y paré en la acera de en frente. Se despidió de aquel chico y entonces entró.

Yo entonces di media vuelta y cuando llegue a casa de Gavi vi un coche que no conocía aparcado justo al lado del de Gavi.

Al entrar me encontré con Aurora, su hermana.

Que aunque veía que venía de hacer ejercicio no se lo pensó dos veces y vino a darme un abrazo.

Yo me disculpé para ir a la ducha y después me arreglé un poco.

Sabía que Aurora no estaba aquí por nada.

Aurora era la mayor de los tres y siempre que habíamos tenido problemas ambos, venía para solucionárnoslo.

Fui a la cocina para llevar algo para beber a ella y a su novio, pero entonces la vi entrar por la puerta.

– Irina, ¿qué está pasando?– preguntó.

– ¿Qué te ha contado él?– pregunté de vuelta.

– Que Ana está embarazada.

Asentí lentamente y me miró fijamente antes de expulsar todo el aire por la nariz.

– Yo la he visto esta mañana, ha entrado en una clínica distinta a la que Gavi la lleva.

– ¿Qué?

Asentí.

– ¿Se lo has dicho?– preguntó.

– No he tenido tiempo.

– Deberías decírselo.

Asentí y entonces salí de la cocina para acercarme a Gavi, que hablaba de fútbol con Javier.

– ¿Podemos hablar un minuto?– pregunté.

Él asintió y agarré su mano para salir al jardín.

– He visto a Ana esta mañana.– murmuré.

– Hoy no me ha llamado en todo el día.

– Ha entrado en una clínica que no es a la que tú has ido con ella.

Me miró fijamente y le vi coger aire.

– Iba con un chico, pero él no ha entrado con ella.

– Hija de-

– No vamos a sacar conclusiones precipitadas antes de que te den los análisis.

– Voy a llamarla.

Le vi entrar en casa de nuevo y entonces subió las escaleras.

Entré para charlar con Aurora y Javier, y entonces al rato Gavi bajó las escaleras con otra ropa.

– ¿A dónde se supone que vas?– preguntó Aurora.

– Ana no me coge el teléfono.– espetó.– Voy a ir a verla a casa.

– Gavi, espera, quizás está en la ducha o haciendo algo.– dije.

No me escuchó y salió cerrando la puerta tras él.

𝐌𝐔𝐓𝐔𝐀𝐋 𝐇𝐄𝐋𝐏 +18 | Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora