VIII

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⚠️ Contenido Explícito

Dejamos a Marina en casa y entonces Gavi siguió conduciendo.

– Jairo me había dicho que le has dejado de seguir en Instagram.– murmuró mirándome.

– Sí. Lo hice.

– ¿Por?

– No quiero parecer una fan.

Le vi sonreír.

– Estás aprendiendo rápido.

– Te dije que siempre aprendo rápido.

– Lo sé, ¿quieres que te deje en casa?

– No. Quiero dormir contigo.

– Como quieras.

Sonreí.

Cuando llegamos a su casa entramos y fui a la cocina.

– ¿Tienes hambre?– pregunté.– Creo que voy a prepararme un bol de frutas.

– Me apunto.

Sonreí y entonces estuvimos cortando manzanas, poniendo moras, arándanos, melocotón...

Vi a Gavi abrir la nevera y entonces lo miré fijamente.

– ¿Qué buscas?

– Leche condensada.– dijo agarrando el bote.

Sonreí negando con la cabeza y le vi echar un poco en su bol.

– ¿Quieres?

– No lo he probado.

– ¿En serio?

Le vi meter el dedo en el bote y después se lo metió en la boca.

Después cogió una cuchara, la metió en el bote y me la acercó.

No me dio tiempo a saborearlo porque pegó sus labios a los míos.

Me cogió en brazos y me levantó sentándome en la encimera.

– Voy a hacer algo.– murmuró

Le vi agacharse y tras abrir mis piernas me quitó las bragas y cogió la cuchara llena de la leche condensada y entonces hundió su lengua en mi interior.

Solté un gemido y después le tiré del pelo.

Sus manos apretaron mis muslos y volvió a abrirlas, pero esta vez aún más.

Solté un quejido y entonces se levantó para besarme.

Me agarró la cara y entonces le quité la camiseta tirándola por ahí y me permití acariciarle la espalda desnuda.

– Irina...

Lo miré fijamente y entonces supe que necesitaba algo de ayuda.

Hacía ya varios días que Gavi y yo habíamos estado viendo vídeos de páginas y había estado explicándome algunas cosas.

Así que lo empujé un poco para poder bajarme de la encimera y después me agaché hasta acabar de rodillas.

– Irina que-

Desabroché su pantalón y entonces lo bajé rápidamente y después hice lo mismo con su bóxer.

Miré su miembro y entonces llevé una de mis manos hasta él.

Luego empecé a mover la mano de arriba a abajo, a una velocidad impresionante.

Le vi echar la cabeza hacia atrás y soltó un gruñido.

Después sin pensarlo demasiado me la metí en la boca.

– Irina, eso no, no te he explicado como se hac-

𝐌𝐔𝐓𝐔𝐀𝐋 𝐇𝐄𝐋𝐏 +18 | Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora