En Busca De Tus Latidos

Capítulo 39

╰┈➤ ❝ [Muerte Al Elegido] ❞

Podría tener remordimiento.

Debería tenerlo.

¿Pero cómo hago para generar ese sentimiento después de escuchar las palabras de mi padre?

"Te quieren por tu poder, quieren tenerte contenta para luego controlarte"

"Ellos jamás harían algo así, son los buenos no los malos"

"En una guerra no existen buenos o malos, están los que fueron obligados a unirse a la causa para poder sobrevivir y luego están quiénes quieren triunfar a toda costa sin importar lo que tengan que sacrificar. Adivina cuáles son ellos y cuáles son tus amigos"

Es por eso que no lo dudé.

Es por eso que no me interesa quiénes puedan llegar a verme entrando en la sala.

-¡¡Eres un maldito!! -Es lo primero que grito cuando estoy adentro, la puerta no se termina de cerrar cuando las miradas curiosas se posan sobre mí -¡¡Avada Kedavra!!

Lanzó el hechizo sin detenerme a pensarlo, la misma luz verde que aparecía en mis sueños se hace presente en lo que recorre la habitación hasta llegar al insípido objetivo.

Desafortunadamente, Potter logra esquivarlo ubicándose detrás de una caja llena de protectores para los demás, supongo que hoy será día de duelo.

‐¡¿Qué mierda te sucede?! -Grita él sin abandonar su posición, no llego a verlo por completo pero si logro distinguir su varita sobre el aire.

-¡¡Tú no eres Layla, eres una de esas estúpidas serpientes usando multijugos!!

-¡¡Esto no es contigo Ronald, así que no te metas!! -Vuelvo a gritar desviando mi varita hacia él, no pienso dispararle pero debe entender que voy en serio -¡¡Eres un maldito hijo de puta, Harry Potter!!

-¡¿Qué carajo hice?!

-¡¡No te hagas el inocente!! -Desearía tener a un acompañante, así podría intimidar a Ronald mientras que me encargo del elegido -¡¿Ese era tu plan, no?! ¡¿Tenerme a tu merced para que siga tus estúpidas órdenes!!

-¡¡No sé de que hablas!!

-¡¡Avada Kedavra!!

-¡¡Mierda!!

Otra vez, una luz verde nos divide creando cierto aura lúgubre.

El grito que da Ronald genera una especie de alivio en mi interior hasta que lo veo salir de su escondite intacto.

-¡¡Expeliarmus!! -Grita en un intento por desarmarme pero lo único que consigue es que ría con gracia.

-¿Cómo puedes ser el elegido cuando solamente sabe un hechizo de mierda? -Su rostro se nubla con una seriedad arrebatadora, no tendría por qué sentir pánico sabiendo que estoy un paso adelante por muy difícil que sea de creer -Y encima lo erras.