¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Benjamín disfrutaba de su soledad, de la poca soledad que lograba encontrar en extraños días como aquel que ningún miembro de su familia se encontraba rondando a su al rededor.
— Oh Dios mío — La voz de Eloise interrumpió el silencio que había causado que rodara los ojos ante la perturbación de la paz que había en ese momento — ¡Ben!.
— Media hora de paz, solo eso necesito — Suspiro.
— Toma tus cosas y ponte decente, nos vamos a casa de Lady Danbury — Irrumpió la chica en su habitación.
— ¿Por qué tendríamos que ir a donde Lady Danbury? — su hermana se movía intranquila mientras le observaba, en su mano reposaba una carta con el sello real resaltando en un tono rojo.
— La princesa Delilah nos ha invitado a tomar él te junto a Pen y eres mi hermano favorito y sé que no me dejarías tirada en esto — ya sabia que era el hermano que mejor le caía a Eloise, pero escuchárselo decir era mucho mejor así podría molestarle más fácil.
— ¿Qué gano yo a cambio? — pregunto recostándose sobre sí mismo — Quiero decir, ¿Qué me beneficia en esto?.
— Tendrás la posibilidad de observar de cerca la galería Danbury y deleitarte con las obras de arte que hay allí.
El carruaje se acercaba cada vez más a la casa Danbury y la curiosidad de ambos aumentaba con cada metro que avanzaban. No era un mal día, el sol brillaba y no hacía calor, una mañana magnifica para visitar a la princesa.
— Ya estáis aquí — Delilah se apuró en recibirlos sin esperar a que estos fueran anunciados, estaba muy emocionada — bienvenidos.
— Princesa — ambos hermanos hicieron una reverencia hacia esta que no tardo en mirarlos con el ceño fruncido — gracias por su invitación.
— No hay de que, el té está servido. Seguidme.
En medio del jardín se encontraba la mesa de té, decorada de manera simple, pero repleta de tantos aperitivos como se pudieran imaginar.
— Me temo que aunque lo he intentado, mis hermanos nos harán compañía hoy — fingió desagrado la chica.
— Lilah, no hables como si fuéramos una molestia. Nos adora — el príncipe Adrián no dudo en acercarse a los recién llegados.
— Me siento ofendido, hermana mayor — el menor de los príncipes apareció en escena, y Ben sintió como su aliento se escapaba.
— Parece que el resto de los Bridgerton tardara un poco en llegar al igual que la señorita Penélope, mientras tanto, ¿Por qué no damos un paseo? — propuso Adrian.
— Perdone mi imprudencia princesa — hablo Eloise, ambas iban de los brazos recorriendo la pequeña galería que tenía su madrina, por petición de Benjamín.
— Eloise, llamame Delilah o Lilah, deja atrás las formalidades.
— Está bien, Lilah — dijo riendo — ¿A qué se debe esta invitación?.
— Ser princesa es un poco difícil, no haces muchos amigos, a demás, quería conocer a los demás Bridgerton.
— ¿Esto tiene que ver algo con mi hermano? — pregunto con un tono de burla la chica Bridgerton.
— No, eso es un tema aparte — contesto Lilah sin poder evitar que sus mejillas adquirieran un leve tono rosa al pensar el vizconde.
— La familia Bridgerton y la señorita Penelope Fetherington, majestades — informaron.
— Ya habéis llegado, que maravilla — Lady Danbury no dudo en acercarse a la matriarca de la familia — sed bienvenidos, vamos al jardín de una vez.
Eloise noto como la mirada de su hermano viajo inmediatamente entro en la habitación a la princesa, con un gesto disimulado se separó de esta para permitirle a su hermano mayos acercarse mientras ella se ponía a un lado de Penelope.
— Que bonito es el amor, ¿no crees, Eloise? — pregunto su amiga pelirroja.
— Se ven bien — respondió ella con simpleza.
— Concuerdo en lo que dice señorita Eloise y señorita Penelope — la voz de Adrian tomo por sorpresa al par — El amor les hace ver bien.
— Si eso es lo que una quiere, no todo amor es bonito — Eloise deseo no ser ella en ese momento y haber aprendido a cerrar su boca ante las personas indicadas — siento mi comentario, no quiero decir que no sea bonito ni nada por el estilo.
— Oh, no se disculpe, me encuentro intrigado — comento el chico.
— Parece que nuestros hermanos se llevan bien — Ben observo al príncipe Ethan hablar más no era capaz de conectar las palabras con los movimientos de su boca – ¿No cree?.
