Nuevamente, Atsuhi volvio a patalear como un niño hasta que el auto dejo de moverse solo que esta vez, estaban en un lugar que él no reconocia.
- ¡Minami! ¡Abajame!
Pero aunque le mordiera el cuello a su pareja, este solo reia levemente mientras lo llevaba sobre su hombro en rumbo hacia un jet que les esperaba- un jet privado, para ser específicos.
El rubio saludo a uno de sus hombres que estaba en la puerta del avion, mientras entraba dentro de la cabina principal la cual: contenia un pareja de asientos reclinables de cuero negro, una mesa pequeña de cafe con algunos adornitos coquetos- incluyendo algunas flores blancas-, sofas de piel que se situaban frente a una pantalla grande de entrenamiento, habían silla grandes que tambien tienen mesa despegables y compartimentos laterales para guardar cosas, además de botones para controlar la musica y/o la temperatura del lugar.
Sin previo aviso, South lo avento sobre uno de los sofas, sacándole un quejido molesto al estudiante.
Y hablando de gentileza.
- Oh, ¿ya llegaron? - sono la voz conocida de Taiju saliendo del compartimento privado, posiblemente terminando de rezar o algo.
- ¿Ah? Si. - asintió el rubio, sentándose al lado de su pequeño quien trataba de no darle una tremenda patada en la jeta. - Parece un animal cuando se molesta. - rio levemente, pasando una mano por su pelo.
El peli-rosa volvio a gruñir molesto, sentándose por completo en el sofa. - ¿Hanma? - miro al sofa opuesto de él, viendo al nombrado estar sentado como si fuese el rey mientras buscaba algo que ver el televisor.
- Hola enano. - saludo con una amplia sonrisa, manteniendo su mirada en la pantalla mientras presionaba los botones del control.
El adolescente volvio a mirar a su pareja. - ¿Se puede saber porque me secuestras? - demando una explicación.
- Primero que nada, no es un secuestro. Solo te estoy llevando a unas vacaciones en medio del semestre escolar. - sonrio, divirtiéndose al ver la expresión del menor. - Y segundo, te prometi que no te iba dejar. - recordó, pinchándole de manera juguetona su mejilla. - Asi que relájate y disfruta. - le dio un pequeño beso en la frente, sacando su teléfono para revisar algo.
Akkun se paso una mano por la cara, queriendo llamar a la policía y hacer que su novio pagara por esto pero si hacia tal cosa, tambien lo arrestarían por "pedophilia" ya si, su pareja tiene veintidós años mientras él tiene quince y no pregunten porque no se entero antes.
Cierto joven de pelo bi-color comenzo a reir, llamándole la atención al menor. - Deja esa cara. - le dijo mientras reia divertido. - Iras a Brazil. - trato de razonar, sentandose bien para mirar al peli-rosa molesto. - Conoceras un nuevo lugar, y aprenderás a conocer mas a este idiota. - bromeo mientras miraba al rubio de los cuatro.
- Callate. - gruño, tratando de recostar su cabeza en el regazo de su novio pero este solo se alejo de él, sin dirigirle la mirada.
Esta vez fue Taiju quien rio suavemente. - Iremos a Rio de Janeiro. - le informo, sorprendiéndose de que el pequeño no se diera cuenta de que ya estaban en el ire. - Tenemos algunos de negocios que atender, pero también podras visitar y conocer lugares ¿vale? - le hablo suave, como si fuese un infante- aunque solo le llevara un año de diferencia.
Akkun asintió en entendimiento, ignorando por completo la mirada molesta que su pareja le daba. - ¿Y cuanto tardaremos en llegar allí?
- Un dia y treinta minutos. - respondio Hanma nuevamente
- ¿Y cuanto duraremos en Brazil?
- Dos semanas. - sonrio grandemente al ver lo pálido que se puso el menor.
- ¡Hijo 'e puta! - se voltio rápidamente para darle un golpe en la cabeza a South, este fallando al esquivarlo mientras sus dos amigos reian a pulmón. - ¡Tengo exámenes la semana que viene! - bufeo.
- Meu amor, podras tomar el examen cuando volvamos. - trato de razonar. - Ademas, no es como si pudiéramos salir y volver al colegio. - dijo sin preocupación, encogiéndose de hombros.
Lo fulmino con la mirada, sintiendo su piel enrojecerse por la ira que sentía en estos momentos. Giro su cabeza hacia una ventana que tenia detras y, efectivamente, sus sospechas fueron corroboradas: ya estaban en el aire. - Desgenerado. Imbécil. ¡Hijo de burro leproso! - volvio a golpearle, esta vez con un cojin mientras se levantaba furioso del sofa y se dirigía hacia la suite principal, ignorando las risas de los otros dos.
South gruño, lanzándole el cojin a Hanma. - ¡Amor! - llamo desde el sofa, ya que no quería saber si se atrevia a ir tras el menor.
- ¡No me hables! - rugio, entrando en la habitación y azotar con fuerza la puerta de esta, asegurándose de cerrarla con seguro.
El rubio se paso una mano por la cabeza, mirando molesto a sus dos amigos.
- ¿Que? - cuestiono entre risas el chico de pelo azul mientras que Hanma, estaba casi que se caia al suelo.
Remiro los ojos.
Ellos fueron quienes le sugirieron traer a Akkun en este viaje pero sinceramente, no podia hecharles la culpa ya que fue él quien no pensó antes de solo "secuestrarse" a su ciruela antes de explicarle todo esto.
- Apodrecer. - bufeo.
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Siempre Supe, Que No Eras Mío (SouKun)
Fanfiction° ¿Que tal si los pandilleros hubieran tomado un descanso temporal? ° ¿Que tal si ellos, hubieran estado con la persona que amaban? ^ Eso hubiera sido algo lindo ¿no creen? Éstos pandilleros tienen sus parejas y pues sus hijos adoptados, pero había...
