35 One-Shots, actualizaciones los jueves por la tarde cuando se termine se harán votaciones por la historia que más le agrado y se escribirá un fanfic completo, disfruten las cortas historias. ☆
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Desde hace unos meses Alastor como Lucifer sentían esas inmensas ganas de tener intimidad pero ninguno daba el primer paso por el orgullo. Y es que era tan obvio por las indirectas que ambos mandaban pero no eran capaces de cruzar esa línea, el rey del Infierno y el demonio de la radio eran jodidamente orgullosos, si el contrario no daba el primer paso ellos no movieran un dedo tampoco ¿pero cuanto durará ese orgullo? ¿cuanto tiempo más tendrán que soportar las ganas de querer tocarse?
Digo para demonios orgullos como ellos podían esperar todo el tiempo que sea necesario hasta que uno se arme de valor y de el siguiente paso pero y la tentación ¿como le explicas eso a la lujuria? Si otro demonio estuviera en su lugar sin importarle su orgullo o cualquier otra cosa podrían hacerlo, de vez en cuando Lucifer envidiaba a Angel, era libre de cogerse a quien fuera y donde fuera pero él no iba hacer a un lado su orgullo por un poco de sexo, él ángel caído no rogaba debían rogarle. Alastor por su parte si quería romper su burbuja de orgullo pero cada vez que lo quería intentar algo lo detenía y ya no hacía nada, no quería perder contra el rey, sabía a la perfección que Lucifer quería algo más con él y no era tan estúpido para no darse cuenta él entendía los chistes sexuales que le lanzaba pero fingía no hacerlo hasta que se lo dijiera de frente y no como broma, Alastor también moría por probar cada centímetro de su rey, quería hacerlo suyo, quería escucharlo gemir su nombre, quería marcarlo, quería hacerle un sin fin de cosas pero no iba dejárselo fácil a Lucifer, Alastor había pasado una eternidad en abstinencia sexual y las inmensas ganas no iban hacerlo perder su orgullo o bueno eso pensó hasta que una desgracia ocurrió, estaban tan ocupados con su calentura que habían olvidado que el cielo había adelantado el exterminio y pues entre la guerra y el caos Alastor y Lucifer se separaron y no supieron de cada uno.
En las noticias se rumoreó que Alastor murió a manos de Adam ya que había pruebas de que ambos se habían enfrentado y Adam realmente hirió gravemente al demonio y como cereza del pastel se decía el como Lucifer mato brutalmente al ángel y se corrió el rumor que su majestad Lucifer tenía como amante a Alastor y al perderlo castigo de la peor manera a Adam con la muerte.
Paso un mes completo y el Hotel Hazbin seguía de luto por perder a Alastor, Charlie estaba tan deprimida y se culpaba por las bajas que había sufrido el infierno y por perder a tres amigos estaba en un estado deplorable que ya no quería seguir con su proyecto, Vaggie, Angel, Husk, Niffty y Cherry hacían lo imposible para que no renunciara a sus sueños, hasta que una tarde alguien tocó la puerta del hotel Charlie fue abrir desanimadamente y al ver de quien se trataba lloró y lo abrazo sin soltarlo un buen rato.
— ¡ALASTOR!
En cuanto el resto de los demonios escucharon aquel nombre fueron a ver, el demonio de la radio seguía con vida y parecía estar mejor de lo que esperaban. Todos fueron a abrazarlo al verlo bien y con vida le hicieron bastantes preguntas pero él solo daba respuestas vagas ya que el había vuelto de la muerte porque aún no cogia con Lucifer, si el sobrevivió fue por el deseo perverso que tenía. Charlie le aviso a su padre el cual no tardo a nada en llegar al hotel, al ver a Alastor se solto a llorar mientras lo abrazaba, definitivamente Lucifer y Charlie tenían tanto en común a excepción de la estatura, después del drama de su rey hicieron una pequeña fiesta de celebración, Charlie había recuperado su brillo al tener de vuelta a su compañero de trabajo y está vez se aseguraría de hacer un mejor trabajo para evitar perder más amigos.
