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Au Humanos

Todavía se siente como si estuviera tomando tu mano, en aquel entonces eras tan hermoso y no lo sabía muy bien como ahora el viento viene con tu aroma pensé que duraría para siempre.

— Hay amores que sólo pueden vivir en tu corazón no en tu vida — Alastor recitaba el fragmento de una poesía enfrente de sus alumnos — Aveces hay amores de paso "no son eternos" ni lo pretenden y aunque duela su despedida no podemos culpar su andar pues cumplen su propósito de enseñarnos a amarnos y y amar mejor.

Al terminar sus alumnos aplaudieron ante la magnífica pronunciación, Alastor cerró el libro y hizo una reverencia ante sus alumnos para agradecer la atención que pusieron le quedaba unos minutos más para que su clase terminara y aprovecho para dejarles su tarea en cuanto escucharon el timbre recogieron sus cosas y se retiraron, Alastor hizo exactamente lo mismo pero fue retenido por una de sus estudiantes.

— Profesor Alastor — la chica estaba sonrojada mientras le extendía una carta de amor — Me gustaría que aceptara mis sentimientos y si hay una oportunidad de que usted y yo...

— Señorita Eva le agradezco sus sentimientos pero es imposible ya que mi corazón le pertenece a alguien más.

Desde que comenzó su carrera de profesor el imagino que llevaría una vida tranquilo quería pasar desapercibido entre todos pero no fue así de repente era el galán entre la preparatoria y eso le incomodaba demasiado así que siempre decía tener a alguien en su vida aunque no fuera verdad, ya comenzaba a fastidiarse.

— Mi mejor amigo — Vox se abalanzó a Alastor — Me entere que ya rechazaste a otra estudiante — se río soltando unas cuantas lágrimas.

— Primero deja de meterte en mi vida personal, segundo quita tu asqueroso brazo y tercero tu y yo no somos amigos — quito el brazo del pelinegro ya que no soportaba que invadieran su espacio personal.

— No seas así Alastor — arreglo su traje ya que se había arrugado — Vengo a dejarte un mensaje, Zestial quiere hablar contigo asi que a su oficina — golpeó su espalda y corrió para que el moreno no lo golpeara por su confianza.

Si tenía que eligir a un profesor a odiar sería Vox, no entendía porque aquel idiota estaba tan obsesionado con él de solo imaginar que talvez lo veía con una intención amorosa le daba unas náuseas, tocó y espero a que le dieran el permiso para entrar a la oficina del director cuando escucho el pase entro y cerró con seguro para no ser interrumpidos ya que tenía cosas importantes por hacer y no quería perder más tiempo.

— ¡Alastor! Toma asiento porfavor — indicó Zestial — He recibido una llamada interesante y como tu estas involucrado no he dado una respuesta como tal por eso te he llamado para saber tu respuesta.

— Soy todo oídos Zestial.

— La famosa y multimillonaria familia Morningstar requiere tus servicios, quieren que seas el tutor personal para uno de sus hijos gemelos, ofrecieron pagarte una gran cantidad si aceptas pero hay un detalle Alastor tendrás que vivir con ellos hasta que su hijo haya terminado su aprendizaje, ¿que opinas Alastor?

— Claro — solto sin más, dispuesto a marcharse volteo a ver a Zestial y le sonrió — La familia Morningstar guarda muchos secretos y quisiera conocer a aquel adolescente que necesita de un tutor.

Ya esperaba una respuesta como esa por lo que no lo detuvo marcó al número de la casa y les confirmó que el tutor había aceptado, Alastor era una persona misteriosa.

Alastor bajo del carro y admiró la mansión era realmente grande y bella, la gran puerta fue abierta por un mayordomo, Alastor al entrar admiró las pinturas y estatuas no había duda que los Morningstar eran de buenos gustos, escucho las tacones de la señora de la casa y hizo una leve reverencia al tenerla enfrente.

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