Capitulo 14

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Izuku estaba llorando a mares en una esquina de la habitación donde lo tenían retenido, no había formas de huir además estaba atado era débil. La desesperación y el miedo se habían apoderado por completo de Izuku. Se sentía completamente impotente y vulnerable, atrapado en una situación aterradora de la que no sabía cómo escapar. Sus lágrimas fluían libremente por su rostro mientras luchaba por mantener la compostura en medio de su angustia.

De repente, la puerta de la habitación se abrió, revelando a Nagant. Su presencia solo intensificó el terror de Izuku, quien se acurrucó aún más en la esquina, temiendo lo peor.

—Pequeño omega, será mejor que cooperes o sino todo será peor para ti — comentó acercándose hasta estar frente a él.

Izuku se hizo un ovillo estaba aterrorizado, — Por favor déjenme ir, yo...

— Tus súplicas son inútiles. Ya has sido elegido para cumplir un propósito mayor, y no hay escapatoria para ti. — Lo interrumpió de manera tajante

Nagant saco de entre sus ropas una ampolleta con un líquido rojo parecido a la sangre

— ¿Qué es eso? — preguntó temeroso

—Esto es un elixir que botara tus sentidos, no sentirás dolor, el elixir te hará sentir adormecido, no serás consciente de lo que te hagan, pero tu cuerpo responderá a sus deseos —explicó Nagant con una sonrisa siniestra mientras se acercaba a Izuku con la ampolleta en la mano.

—No... por favor... —suplicó, con las lágrimas corriendo por sus mejillas. —No me hagan daño...

Pero sus súplicas fueron en vano. Nagant se acercó y le inyecto aquella sustancia.

El cuerpo de Izuku comenzó a sentir los efectos del elixir. Una extraña sensación de adormecimiento y somnolencia lo invadió, haciendo que sus extremidades se sintieran pesadas y su mente nublada. A pesar de sus esfuerzos por resistirse, pronto se vio sumido en una especie de letargo, donde apenas podía mantener los ojos abiertos.

Nagant observó con satisfacción cómo el elixir comenzaba a hacer efecto en el omega. Con cuidado, lo levantó del suelo y lo llevó a la cama que estaba en el fondo de esa habitación.

—Duerme pequeño, el efecto del elixir durará más de 48 horas y el ritual será en 24 por lo que es inminente que no estarás consciente de lo que pase —susurró con una sonrisa macabra mientras cubría a Izuku con una manta y se retiraba de la habitación, dejando al omega sumido en un sueño profundo y sin sueños o eso creía.

Sueños de Izuku

—No puedo permitir que lo hagas — una voz profunda hablaba con desesperación en su voz — debe haber una manera de evitarlo

—No lo hay XXXXXX, sabes que soy el único que puede evitarlo — respondió Izuku.

—Me niego a aceptarlo, no quiero perderte — la otra persona lo abrazo con fuerza y sus lágrimas corrieron

—Y no me perderás, XXXXXX. Estaré contigo siempre, de una forma u otra. Pero ahora necesito que confíes en mí y que hagas lo que te pido. Es la única manera de detenerlos y sabes que mi poder es lo que ellos quieren, pero también es lo único que los puede detener —respondió Izuku

De repente, una tercera voz se escuchó, pero el ambiente cambio el lugar se veía totalmente blanco, la voz era suave y tranquilizadora.

—Izuku, mi querido hijo, no temas. Estoy aquí para ayudarte, siempre lo estaré. Pero debes recordar quién eres y de dónde vienes. Eres más fuerte de lo que crees, y tienes el poder dentro de ti para cambiar tu destino.

ENTRE MASCARAS Y CORAZONES (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora