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El sonido del silbato resonó en la cancha, marcando el inicio de las semifinales de los playoffs. La tensión en el ambiente era palpable, pero algo inusual sucedía: los integrantes del equipo de Dan llegaron tarde, incluidos los gemelos. La regla de los playoffs era clara, con solo tres jugadores presentes, perderían por default si no completaban el equipo.

Dan, aunque físicamente incapaz de jugar debido a su lesión, se vio obligado a entrar en la cancha para evitar la derrota por default. Se notaba la incomodidad en su rostro, pero su espíritu competitivo se mantuvo fuerte. Mientras se unía al juego, la preocupación se reflejaba en los rostros de sus amigos.

"-¿Dan, estás seguro de que puedes hacer esto?", preguntó Axel, mostrando preocupación.

Dan asintió, forzando una sonrisa. "-No es ideal, pero no podemos perder por default. Haré lo que pueda desde aquí".

De repente, cuando la situación parecía sombría, los gemelos y el resto del equipo llegaron corriendo. Iván, al ver a Dan en la cancha, reprimió cualquier reproche con amabilidad y lo llevó al banquillo.

"-No queríamos llegar tarde, lo sentimos", se disculpó Diego.

"-Está bien, chicos. Al menos ya estamos todos aquí", respondió Dan, tratando de restar importancia a la situación.

El partido se intensificó, pero el equipo liderado por Axel no pudo revertir la situación. La frustración se apoderó de ellos al perder, pero aún quedaba una posibilidad en la serie. Mientras el equipo se retiraba de la cancha, Dan se quedó reflexionando, con su mente llena de emociones encontradas.

Iván se acercó a Dan con una mirada comprensiva. "Lo siento por ponerte en esa situación, Dan. Si necesitas algo, estoy aquí".

"-Gracias, Iván. Fue un malentendido, no te preocupes", respondió Dan, apreciando la consideración de Iván.

La imagen de Iván, mostrando comprensión en lugar de reproche, dejó una huella en el corazón de Dan. A pesar de la derrota, la conexión entre ellos parecía fortalecerse. Mientras se dirigían al vestuario, Dan pensó en la complicidad silenciosa que compartían.

Al salir de la cancha, Dan se quedó unos momentos en soledad, observando las luces del estadio. La confusión y los sentimientos encontrados llenaban su mente. ¿Cómo seguiría la relación entre él e Iván después de esta experiencia? Las preguntas flotaban en su mente mientras se dirigía a la siguiente fase de esta intrigante historia.

¿Qué depararía el futuro para Dan e Iván en el próximo capítulo de esta emocionante travesía? ¡Permanezcan atentos a la siguiente entrega! 🏀💔✨

Amor en Doble JugadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora