𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑇𝑟𝑒𝑠

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-Te odio. - le dije por cuarta vez a Luisa quién me planchaba el pelo.

-Sé que me amas. - decía sonriendo. -¿Invitaste a Tom verdad?.

-Que siii. - rodeé los ojos.

-No me rodees esos ojos tan hermosos. - bromeó.

-Ya déjame. Estoy enojada. - me crucé de brazos.

-¡Vamos a cambiar ese humor!.

Ella empezó a hacerme cosquillas. Nos reímos un rato y luego comenzó a peinarme de nuevo, 30 minutos después estábamos en la puerta esperando a los chicos.

-¡Rick está abajo!. - me dijo apurándose.

Ambas empezamos a bajar corriendo mientras reíamos sin parar, nos empujamos entre ambas y hacíamos bromas. Pero al llegar al vestíbulo paramos en secó a ver nuestras citas esperándonos.

-¡Rossi!. - me saludo Tom y río mientras decía. - Me asusté, pensé que él te buscaba a tí. - decía riendo mientras se acercaba a besar mi mejilla.

-Oh no. Solo quedó contigo. - dije riendo mientras lo saludaba. -Ella es mi amiga Luis. O sea, Luisa. - me reí.

-¡Hola!. - dijo Luis saludando a Tom.

-Hola, es un gusto . ¿El es tu novio? - decía Tom señalando a...

Vaya, era gordito, bajito y no tan guapo. Luis era hermosa y salía con él.

-¡Si!. - dijo ella y fue a saludarlo.

La cara del supuesto Rick fue de pura felicidad y más cuando ella se acercó a él a besarlo. Parpadee y mire a Tom quién me sonrió.

-¿Iremos en el auto de el?. - me susurro.

-Sip. - le sonreí.

Los ojos de Tom eran color ámbar.

-¿Y tú negocio?. - pregunté y miré a Luis quien seguía besándose.

-Mi hermano se quedará hoy. - me respondió.

-Oh genial. ¿No tienes miedo?. - murmuré.

-No claro que no. - murmuró el.

-¿Por qué no?

-Porque tengo seguro, para todo. - empezó a reír.

-¿De dónde sacas tanto dinero?. - pregunté con curiosidad.

-Mis padres tienen mucho dinero. Pero mi papá me corrió de casa a los 20 años, y está bien, ya no importa. Pude salir adelante gracias a mi madre que siempre me dió dinero a escondidas. Así pude tener mi propio negocio y luego solo fui avanzando de a poco. - contó mientras se encogía de hombros.

-¡Vamos!. - nos gritó Luis y ambos salimos detrás de ellos.

Salimos afuera y el novio de Luis tenía un lindo auto negro. Los tres subimos y salimos rumbo a... no sé dónde pero alguna fiesta. Íbamos entre música, bromas, anécdotas y un Tom abrazándome por los hombros. Rick tenía su mano en la rodilla de Luis y ambos iban riendo sin parar.

Yo no sabía cómo decirle a Tom que me caía bien pero nada más que éso.

-¡Llegamos!. - dijo emocionada Luis al llegar a un lugar con letreros en neón.

Bajamos rápidamente y tomé a Luis del brazo y le murmuré.

-Tomas me está incomodando. - dije muy bajo.

-¡Aguanta amiga!. - me gritó en el oído y empezó a reír mientras iba hacia Rick y lo tomaba del brazo.

Suspiré y Tom se puso a mi lado.

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