Decisiones

12

Cuando escuché lo que dijo Shi Oh, no sabía si lanzarme a sus brazos o llorar, nunca ni siquiera en mis sueños más locos habria pensado en que el me diría algo asi, lo mire por unos segundos asimilando lo que escuche.

- ¿Hablas enserio? ¿Quieres que me vaya contigo?- Le pregunte mirándolo a los ojos sorprendida.

- Si, quiero que vayas conmigo, no quiero imaginar todo ese tiempo lejos tuyo y que encuentres a otra persona.- Cuando me dijo eso todavía tenía mi brazo agarrado, lo retire suavemente.

- Nunca podría encontrar a alguien que me haga sentir igual que tú, de eso no te tienes que preocupar.- Tome su mano y la acaricie con mi dedo pulgar.

- A mi tampoco me gusta pensar el estar tanto tiempo lejos de ti, así que si, quiero ir contigo Shi Oh.- Termine de hablar mirándolo a los ojos.

De inmediato sentí como me besaba de forma tierna, sus manos en mis mejillas acariciándome, había extrañado tanto eso.

- Gracias por aceptar, no sabía que hacer si decías que no.- Dijo el sin alejar su rostro del mío.

- Desde el principio nunca estuvo en mis planes decirte que no.- Dije con una sonrisa.

- Me alegro escuchar eso.- No me dejó responde cuando ya tenía sus labios sobre los míos una vez más.

El beso era tierno y suave pero no siguió así por mucho, ya que el comenzó a dejar besos húmedos por su cuello haciendo que está suelte suspiros, Shi Oh levanto a Len-hee por los muslos haciendo que ella envuelva sus piernas en su cintura, ambos estaban sumidos entre besos y suspiros mientras se acercaban a la habitación dejando la ropa en el camino.

(...)

Al día siguiente Len-hee fue la primera en despertarse, su cuerpo se sentía adolorido, especialmente sus caderas, pero eso paso a segundo plano cuando se encontró con Shi Oh durmiendo tranquilamente a su lado, mientras que ella estaba usando su brazo de almohada, sonrió y se deslizó de la cama, se puso la camisa de Shi Oh sintiendo el aroma de esta y se dirigió a la cocina a preparar el desayuno. Mientras estaba de espaldas a la habitación escucho unos pasos acercarse por detrás y unos fuertes brazos posarse en su cintura abrazándola, soltó una risa y hablo.

- Buenos días, creí que serías el primero en levantarse.- dijo revolviendo una sartén.

- No quería levantarme.- Murmuró mientras escondía su cabeza en el cuello de Len-hee.

- ¿Y eso por qué?-

- Hace tiempo no dormía tan bien.- Cuando dijo eso la tomo por la cadera y la giro para verla de frente. - Pero no me quejo si esto es lo que veré todos los días cuando me despierte.- Dijo en un tono coqueto.

- Esto ya está, ve a sentarte.- Dijo Len-hee entre risas.

- Por cierto, me encanta como te queda mi camisa.- Hablo cerca de su oído con una sonrisa pícara para luego separarse de ella y sentarse.

Len-hee sintió su rostro acalorado por eso, pero negó con la cabeza y se sentó frente a el comenzando a comer con una sonrisa.

- Pues yo tampoco me quejo de las vistas.- Dijo mirando a Shi Oh de arriba abajo, quien solo traía un pantalón gris de chandal con el torso descubierto.

Shi oh se atragantó con un pedazo de fruta que están comiendo y tomo agua, para luego mirar a Len-hee con los ojos entrecerrados.

- ¿Qué? No dije nada que no fuera cierto.- Dijo ella con una sonrisa burlona en su rostro. El río y nego con la cabeza, el desayuno continúo entre risas y un ambiente agradable, luego de eso Shi Oh se fue a trabajar y Len-hee a su departamento.

(...)

Cuando llegue al departamento lo primero que hice fue acostarme en la cama con una sonrisa, estaba feliz por todo lo que estaba pasando con Shi Oh, pero esa sonrisa no me duró mucho ya que recordé lo que había dicho, Pavel lo estaba buscado y no quería que le pasará nada malo, estaba dispuesta a dejar todo para irme con el, estaba sumida en mis pensamientos cuando mi celular comenzó a sonar, lo saqué de mi bolsillo y hablé.

- ¿Hola? ¿Que necesitas?-

- Len-hee, tengo que hablar contigo, ¿Estás ocupada?- Era Nam-soon.

- Eh, no, estoy en el departamento.- Hablé confundida.

- Bien ahora voy.- Y con eso colgó, suspiré cansada, que sería lo que me diria ahora, que otro problema aparecería.

Cuando Nam-soon llegó, se veía agitada, y la entendía, tenia muchas cosas que hacer con la investigación y guardar silencio con mi madre no era fácil, solo esperaba que no le haya dicho nada sobre Shi Oh.

- ¿Qué pasa? Te ves muy mal.- Le dije mientras le daba un vaso con agua.

- Gracias.- tomo el agua rápidamente y luego dejo el vaso en la mesa.

- Quiero que me escuches muy atentamente, descubrimos que Shi Oh está involucrado con la mafia rusa llamada Pavel, son muy peligrosos, la mayoría de ellos si no todos, son sicarios, Len-hee tienes que alejarte de el.- Hablo con seriedad, tanta que me dió miedo por un momento.
No sabía que hacer o decir, el ya me había contado todo, pero no sé lo diría a Nam-soon, eso solo la alteraría mas.

- Yo, no sé que decir, no sabía que esto sería tan grande, pensaba que solo se trataba de la droga pero, ¿La mafia rusa? Eso es demasiado.- Hable en un tono de voz afligido mientras ponía una mano en mi frente.

- Lo se Len-hee, y perdona por decirte todo esto de repente, se que es el hombre al que amas, pero no podía no contarte esto.- Nam-soon tomo mi mano mientras decía esto, en sus ojos se notaba la preocupación, lo que me hizo sentir mal por mentirle.

- Está bien Nam-soon, lo entiendo, pero ¿En serio es así?¿El está distribuyendo la droga para Pavel por voluntad propia?- Quería saber hasta que punto sabían, si sabian algo sobre el antídoto o solo estaban enterados de eso.

- Por lo que sospechamos si, esta todo en conjunto para que la droga pueda esparcirse de forma rápida, incluso se manda droga para Rusia desde aquí.-

- Ya veo, gracias por decirme Nam-soon.- Dije tomando su mano.

- No hay de que, te lo tenía que decir.- Suspiro para luego mirarme.

- Bueno, dejando de lado eso, ¿como está Nam-in? Y todos los demás.- Trate de sonar lo más normal posible.

- Todos están bien, pero creo que mamá sospecha de algo.-

- No le has dicho nada sobre Shi Oh, ¿Verdad?- Le pregunte preocupada.

- Claro que no, pero sabes cómo es mamá, y últimamente pregunta mucho por ti, no has mandado ni un mensaje desde que "estas de viaje".- Dijo Nam-soon haciendo comillas en la última frase.

- Ah, cierto lo había olvidado, supongo que tendré que escribir en estos días, dile que hable contigo si.-  Le pedí juntando mis manos.

- Si no te preocupes, yo le diré eso, pero por favor escríbele sabes cómo es de insistente, y trata de mandar algunas fotos del lugar en dónde estás, para que no sospeche.- Dijo mientras se levantaba y se dirigía a la puerta.

- Si, lo haré, muchas gracias de nuevo Nam-soon, adiós.- Dije abrazándola mientras me despedía de ella.

Cuando ella se fue, busqué algunas fotos de lugares con playas y lindos paisajes, además de algunas fotos que ya tenía con Nai-so para mandar y que no estén encima de Nam-soon, eso no era lindo, lo se por experiencia.

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Pido perdón 😔 me había olvidado
Que estaba escribiendo, pero ya volví.