🧡❤️ Después del tenso enfrentamiento con la Liga de Villanos y el rescate exitoso de Bakugo, la Clase 1-A de la U.A. se encuentra de vuelta en la academia, enfocada en prepararse para el próximo desafío: los exámenes de licencia provisional. Kirish...
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A causa de la pelea la noche después del exámen de licencias provicionales, Bakugo y Midoriya fueron castigados haciendo tareas en la residencia de héroes y demás deberes sin poder ir a clases. Bakugo tuvo un día más de castigo que el Peliverde y eso lo frustraba, mientras el Cabeza de Brócoli ya había regresado a clases, él continuaba perdiendo el tiempo en estupideces.
Después de terminar las clases, Kirishima camina hacia la residencia junto a Azumi, que comía un dedo de queso que parecía disfrutar.
— Entonces, ¿tu chico explosivo volvió a meterse en problemas?
— No sé los detalles, pero creo que su pelea con Midoriya le ayudó, es decir, sí, lo castigaron y está un poco de mal humor por eso, pero se le ve más tranquilo...
— Ajá... Tranquilo... Todo un retoño. – dijo la chica señalando hacia el respaldo de la residencia, donde se encontraba un Bakugo malhumorado, peleando con 2 bolsas de basura que intentaba meter dentro de los botes del reciclaje.
— Hay que darle crédito, está separando el material reciclable...
— ¡Maldita basura de mierda! ¡Malditos contenedores del culo! ¡Malditos imbéciles! ¿Qué tan difícil es separar el puto cartón de las botellas? ¡SON TODOS UNOS INÚTILES, ANORMALES DE MIERDA!!!
— Adorable... - dice la chica con ironía, dandole un mosdisco a su bocadillo.
Kirishima observa la escena, que le resulta graciosa y adorable. Es como ver a un perrito diminuto mordisqueando un zapato enorme, frustrado por no poder destrozarlo. El sol del atardecer hace que su cabello rubio brille y sus músculos se vean más prominentes de lo que ya son. El esfuerzo que hace para mantenerse concentrado en la tarea de separar los materiales hace que algunas venas se marquen en su rostro perfecto, lo que lo hace aún más atractivo. Tanta intensidad contenida... – ¿Empieza a hacer más calor?, maldita sea Bakugo, ¿cómo eres tan irresistible?
Las ideas de Kirishima son interrumpidas por la abrupta introducción de una masa grasosa en su boca, lo que provoca un espasmo en su garganta, haciéndolo toser fuertemente.
— ¡Ahk! ¡A-Azumi! ¿Qué te pasa? ¿Por... por qué hiciste eso? – se quejó mientras se golpeaba el pecho y tocía para no ahogarse con el pedazo de pan que le había metido la pelirroja en la boca —¡Ahk!
— ¿Ah? ¿No querías un poco? Tenías la boca tan abierta que se te escapaban las mariposas... – le respondió la chica burlándose —No tienes remedio Eijiro. Al menos disimula un poco.
— ¡Shhh! Va a escucharte – susurró al ver que Bakugo volteaba la mirada hacía ellos, gracias al escándolo que había causado la tos del Pelirrojo.
Aunque Bakugono le dió mucha importancia, terminó de seleccionar los residuos y entró a la recidencia, probablemenete a seguir gritándole a los demás.
