𝒅𝒊𝒆𝒄𝒊𝒔𝒊𝒆𝒕𝒆

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—¿Cuántos labiales tengo en mí bolso? A ver, intenta saber eso. Eh...—el soltó una risa gutural y remojo sus labios. Estábamos haciendo esos juegos típicos de cuando uno se encuentra sin hacer nada y aburrido, bueno ambos estábamos intentando adivinar ciertas cosas del otro.

El levanta sus ojos y cejas, era cómo si fuera que estaba pensando. Volvió a mirarme a los ojos, —Cuatro labiales...—muerdo mis labios, intentando no darle el—...¡no! ¡¿adivine?!

—¡No abrí mi boca siquiera! —reprocho. El me sonrie y asiente varias veces, diciéndome "si..si.." —¡No, no lo son!

Esté se me tiro arriba empezando a hacerme cosquillas, intento separarme y me tiró para los asientos traseros. El me siguió intentando seguir con las cosquillas...—¡Basta, Thomas! ¡Tom basta! ¡Me haré pipí! —el siguió mientras soltaba carcajadas. Burlándose de mi, por lo que pronto me haría en mis braga.

De un movimiento que hago el coloca sus manos en mi cintura haciéndome subirme sobre el. Intento salirme pero no me deja.

—Tom..

—Emi..—muerdo mi labio inferior con nervios. Lo veo nuevamente colocar sus manos en mi abdomen para hacerme cosquillas, empiezo a moverme sobre el. No me importó si gruñia del dolor al recibir uno de mis rodillazos.

—¡No te muevas! maldición...—gruñó con su voz ronca y grave, tuve que limitarme con las cosquillas y bajarme. Tarde, sus manos nuevamente cayeron en mí y empezó a moverme en un vaivén sobre él —¿Si te dijera que te muevas?

Mis mejillas comenzaron a arder, colocó mis manos en su pecho intentando apartarlo. —Tom no, creo que fui muy clara contigo—el rueda sus ojos y parece no importarle, siguió moviéndome pero de un movimiento me tiro hacia el costado.

—¡Dios Emily! ¿podrías disfrutar esto? —se quejó gruñendo.

—¿Disfrutar ya que no está Ivan, eso es lo que quieres? ¡no! ¡olvídalo! —intento abrir la puerta y salir pero recuerdo que estaba lloviendo. Maldita sea, quiero irme de aquí.

—Cómo siempre intentando escapar de mí, ¿te doy miedo o qué? —se ríe. Ignoro lo que me decía e intento pensar otra cosa que no sea el, esto estaba haciéndome incomodar.

Iván está de viaje por su supuesto empleo, no se bien aún y debí averiguar eso. Tengo alguien en mente, me podría ayudar lo sé, pero ahora el tema de que yo tampoco debería engañarlo. ¡Debía intentar no hacer nada con el hijo de mi esposo! ¡y mantenerme en total silencio y con una gran distancia!

—¡Emily! —pego un salto. Lo miro mal y este suelta una risita—, ya paro la lluvia, ¿bajamos?

—Ehm, sí..










































[...]


—Hola mí hermosa—me da un corto beso en los labios. Le sonrió gustosa, abrazando su cuerpo lo miré de abajo al ser más pequeña que el, por poca diferencia—, ¿cómo estuviste?—

—Te extrañé, semanas que no te tengo conmigo. Fue más que un sufrimiento, casi entro a un estado depresivo—bromee haciéndolo soltar una risita. Me agarró de la caderas acercándome a él, con brusquedad,—ey—me quejé

—¿Mh?—no le importo. Siguió dándome besos mojados en todo el cuello, haciendo que ladee mi cabeza al lado izquierdo dándole más acceso, se le escapo un suspiro exasperado haciéndome poner la piel de gallina ante ese cálido y brusco golpe a mi piel débil—, ¿qué tal te portaste sin mí?—Murmuró contra mi piel, aún dándome besos.

Bien, más que bien, muy bien al no ser tentada por su hijo.

—Muy bien, creo que merezco mi premio—jugueteo con los botones de su camisa al verlo alejarse de mi para mirarme a los ojos

—¿Ah sí?—coqueteo

—Mmjh—asentí viendo sus labios pero de repente la puerta de mi oficina se abre, golpeando la espalda de Iván

—¡Ay lo siento!—era su hijo menor, Bill, mierda. Esté al vernos tan juntos se giró volviéndose afuera

Me cubrí la cara, avergonzada pero también con temor—¡Iván!—lo regañe. Creó que el es culpable y yo por dejarme llevar, apareció de la nada en mi oficina luego de estar tomando la asistencia él entro. Haciéndome su sumisa casi entregada a el, a sus brazos, tan fuertes como el. Pero debería mantener mi postura al saber que estoy en una institución que me vería mal si ese alumno no haya sido Bill.

—Pues tu me tentas, ¿que querías?—fingió demencia. Haciéndome sonreír.

—¿Necesitas algo?—acomodo mi vestimenta para mirarlo

—A ti—chasqueo la lengua haciendo su cabeza al costado—daah...

—Ya se, pero estoy en mi trabajo, ¿podrías ser más decente y esperarme en casa?—hizo como qué estaba pensando sobre mis palabras, que por cierto eran tan lógico, ¿vino y para follar aquí? osea me gusta la idea pero mi directora o alumnos me encuentran encerrada con mi esposo teniendo sexo, es más que obvio que yo misma me cuelgo del cogote, mi suicidio.

—¿Y si no quiero?—cruza sus brazos fijando sus ojos en los míos, poniéndome nerviosa—¿mh?

—Na‐nada—estúpida

—¿Na‐nada?—copió mi tartamudeo. Haciendo que ruede mis ojos—¡no te enfades pichona!—agarra mis mejillas dándole un leve apretón—, yo mismo voy a esperarte en casa y con un almuerzo tan especial. En síntesis, preparo mi propia bienvenida, adiós.—deja un beso en mis labios y así salir de mi oficina. Veo que Bill aún seguía esperando, con su torso apoyado en la pared y mirando al suelo.

—¿Bill?—aclaró mi garganta, incómoda—¿querías algo...o...era‐

—Hablar contigo, de ambos, de mi y de ti...—se me acerca—¿realmente te importó? ¿Tom y yo te importamos?—mucho no, muchísimo.

—A‐ah Bill...—otra vez no, mis ataques. Joder.

—Respóndeme, ¿nos ves cómo juguetes sexuales que necesitas entretenerte y experimentar o, cómo algo más?—SÍ, la segunda opción Bill....¡No!

—Es..es tan rápido, no, digo es algo de pronto. ¿Por qué esto de pronto?—su mirada baja al suelo, nuevamente—acaso tu y Tom...¿están como...‐

—¡No! pero debemos saberlo, no quisiéramos esperarte. Digo que...queremos hacer nuestra vida, aparte, lejos de...ti...—auch, fue mi sensible corazón. Mierda duele...

—Dices que...‐

—Digo que no quiero seguir con esto. No más, por ti y por mi, por...Iván..—











Hola madafack
espero que estén bien, los extrañé y no saben cuánto. Ando últimamente muy ocupada, llena de tarea, tp, exposiciones y eso que estamos comenzando pero bueno, creó que comencé con el pies izquierdo.

les mando besos, saludos y un abrazo virtual. Espero tener su apoyo aún, perdón la inactividad pero entiendanme, les dejo una actualización de esta historia que estaba muy inactiva.

Lkm🤍

𝔸 𝔻𝕒𝕣𝕜 ℝ𝕠𝕞𝕒𝕟𝕔𝕖|| 𝗧𝗼𝗺 & 𝗕𝗶𝗹𝗹 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora