Los reyes de los Dragones y la Piedra Esmeralda

22. La remera azul de los protagonistas

— Me estás diciendo que crees que la copa esmeralda tiene algo que ver con lo que nos está pasando, ¿y tu mejor idea es ir a buscar que es exactamente? — Sky asintió, un poco menos convencido que cuando había comenzado a hablar

— Pues si me lo dices así parezco suicida — Sky tomó un sorbo de su gaseosa, repensando su idea

— Sky, estamos sentados en el techo del establo de nuestros dragones a medianoche, ¿Te parece que recién ahora suenas suicida? — Vittani se llevó los mechones rebeldes que caían por su rostro detrás de sus orejas, molesta porque escaparon de su trenza

— Pero si me lo dices así de feo suena peor — se cubrió con ambos brazos cuando su compañera le tiró una galleta en la cara

— Serás llorón — Sky analizó el arma comestible por un segundo y luego le dio un mordisco, pensando en lo horrorizada que estaría su madre si supiera que se saltaba la cena para hacer picnics nocturnos con Vittani

— De verdad creo que esta relacionado, y también creo que los grandes saben algo y no nos lo dicen — como había pasado con Dakaria, los directores de elementos habían dicho que llegarían al fondo del asunto, sin presentar ningún resultado en realidad

— ¿Por qué sabrían algo ellos? — la chica desató su trenza y comenzó a armarla otra vez, esperando la respuesta de aquel delirante chico

— Cuando me pusieron a limpiar las copas, y encontré el collar que te di, la copa esmeralda se me cayó, pero sonó como el ruido de un plástico, no como una copa real — se suponía que la copa estaba hecha de esmeraldas reales, no podía haber sonado como simple plástico al caer

— ¿Y eso que tiene? Podrían robarla, obviamente no tendrían la real en una escuela — Sky negó con la cabeza

— Silvan no sabía que era de plástico, él estaba junto a mi cuando cayó literalmente sobre mi pie y casi gritó creyendo que me lo rompí, y cuando le pregunté si no sabía que probablemente la intercambiaron por una réplica para evitar ese tipo de cosas se puso nervioso y juró haberlo olvidado — se echó el cabello para atrás con los dedos — cuando encontré el collar vi algo más dentro de la copa, pero tuve que distraerlo con él para que no intentara evitar que siga indagando — Vittani jugueteo con el collar entre sus dedos, intrigada

— Sky, te juro que solo pienso que los tres días durmiendo te afectaron el cerebro, pero yo también dormí tres días seguidos así que voy a ayudarte —

— Así comienzan las sagas de niños protagonistas con instinto suicida — murmuró Sky, recibiendo otro golpe de galleta

— Hey, al menos ninguno de ellos está muerto —

— Si claro, solo con, ¿que? ¿diez, veinte años de traumas? pf, nada — Vittani rodó los ojos, aquel mes que parecía haber pasado volando la había acostumbrado a sus comentarios y su falta de sentido de supervivencia

— Si vas a hacerte el héroe tienes que dejar que te ayude — Sky sonrió un poco, acostumbrado a su personalidad mandona

— Bien, pero si caigo en una misión suicida voy a empujarte por la escalera — Vittani estiró la mano hasta su cabeza y le pegó un tirón de cabello

— No me vas a empujar un carajo, cerebro de rana, así que vas a acostumbrarte a mí — Sky le obsequió una amplia sonrisa, observándola partir la galleta para comerla en pedacitos mientras se apartaba los mechones del rostro con frustración

— tranquila, ya me acostumbre —