Capitulo 62

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Kira Maslova

—¡Jasha!—grito emocionada—¡Jasha, ven ahora!

Veo como Kay gatea torpemente y saco mi celular para empezar a grabar y poder tener siempre este recuerdo.

—¿Que pasa mujer? ¿Por qué esos gritos?

—¡Mira!—apunto a mi hijo que gateaba hacia la caja de juguetes.

Jasha mira hacia Kay y sonríe al verlo gatear. Chillo emocionada acercándome hacia el y mis ojos se llenan de lágrimas. Crecía tan rápido.

Kay sonríe al verme y balbucea alzando sus brazos.

—Gateaste, mi amor—le digo sonriendo

Kay ríe como si me entendiera y estira sus brazos. Termino el video y cargo a mi hijo de siete meses. Beso sus mejillas regordetas. Jasha picotea su pierna y Kay ríe divertido.

Kaya por su parte estaba muy concentrada en morder un juguete mientras estaba sentada en el sofá, totalmente ajena a que su hermano había dado su primer gateo.

—Crece tan rápido—murmuro acariciando su cabello rubio y unas lágrimas bajan por mis mejillas—. Mi bebé está creciendo, será dentro de poco cuando vaya al kinder.

—Siempre podemos tener otro—propone Jasha subiendo las cejas

—Ya sabes la respuesta de ello—dejo a Kay en el suelo y le entrego su sonajero. Empieza agitarlo llamando la atención de su hermana.

—Los mellizos ya urgen de un hermano—responde Jasha

—Pero no por ahora—determino

Jasha solo suspira mientras que se acercaba a cargar a Kaya, para dejarla aún lado de su hermano.

••••••••••

Kay lucha contra el sueño y trata de mantener sus ojos abiertos. La hora de su siesta ya había llegado y estaba haciéndolo dormir.

Su mano se aferraba a mi blusa mientras tomaba de mi pecho. Le había puesto su tuto cerca para que pudiera dormirse con más facilidad.

Mi pequeño trataba de mantenerse despierto, pero cada vez el sueño lo vencía más y más hasta que finalmente quedó profundamente dormido. Espero un rato para poder separarlo, asegurándome que este profundamente dormido.

Lo dejo en su cuna donde Kaya ya estaba dormida y aferrada a su peluche. Dejo el chupón en sus bocas y beso sus cabezas. Activo el monitor de la mesa de noche y salgo de la habitación dejando la puerta cerrada.

Camino hacia la habitación donde Jasha estaba revisando unos documentos. La cama estaba esparcida de papeles y tenía su computadora en su regazo.

—¿Mucho trabajo?—inquiero

—Papá nunca me dijo que verificar los números de los bares y club era tan agotador—suspira—. Debería tener a alguien para esto.

—Deberias contratar a alguien—apoyo

—¿Los bebés están dormidos?

—Si—asiento mientras tomaba una de las tantas hojas— Kay batallo un poco con el sueño, mientras que Kaya cayó dormida muy fácilmente.

Jasha sonríe mientras que seguía revisando todo los documentos.

—¿Que hay del atacante?—pregunto

—Aun sigue su búsqueda—responde Jasha y cierra su computadora—. Es impresionante en la manera que puede esconderse.

—Espero que luego lo encuentren—me incorporo de la cama y le sonrió a Jasha—. Iré a darme una ducha, aprovechando que los niños duermen.

𝑺𝒆𝒎𝒑𝒊𝒕𝒆𝒓𝒏𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora