𝑺𝒆𝒎𝒑𝒊𝒕𝒆𝒓𝒏𝒐

Capitulo 31

Kira Maslova

Preparativos de boda.

En toda mi vida he asistido a demasiadas bodas para mí gusto. Ser hija del Capo de la mafia italiana implica asistir a todo clases de eventos desde que tenia cinco años.

Los preparativos de mi boda con Jared fueron demasiado rápidos. Solo tenía un mes para realizar todo y en verdad fue algo que no pude disfrutar mucho.

Mi mayor sueño fue tener una boda a lo grande. Que todo fuera detalladamente elegido por mi y disfrutar cada paso que daba hasta por fin llegar al día que celebraría el evento.

Ahora podía disfrutar del proceso de mi boda.

—No quiero colores muy llamativos. Si no más bien delicados—le digo a la encargada de preparar mi boda

Mi madre junto mis tías veían revistas buscando decoraciones para la boda. Ellas definitivamente amaban planear estos eventos. Bueno mi tía Zaria no tanto pero aportaba si se requería.

—¿Alguna gama de colores?—pregunta la encargada

—Colores pasteles y sobretodo el blanco, quiero una combinación con esos tonos y el blanco

—¿Que le parece este rosado pastel?—me enseña un tono del rosado pastel. Hago una mueca.

—Mas suave el color

—¿Este quizás?

Sonrió al ver el tono. Era un rosado más suave que me gustaba demasiado.

—Ese quiero—confirmo

—¿Alguna idea para la decoración?

—Quiero rosas, pero no demasiadas. No quiero que el olor quede impregnado—respondo—. Quiero que el pasillo tenga pétalos, de preferencia blancos y rojos

La encargada anotaba todo en su tableta mientras asentía.

—En los asientos quiero que cada esquina haya un tocado muy elegante

—¿Que te parece un lazo? Puede ser rosado pastel o blanco para que así conviene con las rosas que habrán alrededor—sugiere

—Me gusta—sonrio y tomo asiento aún lado de mamá

—¿Cuántos invitados habrán?

—Bueno... ¿Doscientos?

—No, recuerda que debes de invitar a la rama más importante de Italia junto la de Rusia, incluyendo a las familias de cada novio—habla mamá

—¿Trescientos?—pregunto a mamá

—Cerca de cuatrocientos quizás—responde mamá

—Recuerdo que en mi boda hubieron casi trescientos invitados—habla la tía Zaria—. Ni Luca ni yo conocíamos siquiera a la mitad

—En la mía había cuatrocientos cincuenta—habla mamá—. También hay que invitar a las ramas amistadas para no generar problemas o malos entendidos.

—Creo que cerca de quinientos—le digo a la encargada

—¿Ya has visto salones?—pregunta la encargada

—La boda se realizará en Rusia, aunque no se exactamente dónde—respondo

—Eso aún está en conversación—responde mamá

—Bueno, te estaré enviando unas ideas para que vayamos viendo primero que nada las invitaciones, junto la decoración principal—me dice la encargada

—Esta bien

Ella se despide de nosotras y abandona la sala de nuestra mansion. Sonrió emocionada y abrazo a mamá quien ríe ante mi emoción.

—Esta será la boda de mis sueños, mamá—le digo

—Lo sera—asegura mamá

—¿Sentías esta emoción cuando planeabas la tuya?

—No la verdad, estaba aterrada en ese momento de casarme con tu padre—admite

—La boda de tu madre fue a lo grande a pesar de que era "sencilla"—habla tía Zaria

—Recuerdo haber pedido tarta de moras para el postre sin saber que tu padre era alérgico—rie mamá

—Pudiste haberlo matado

—Tu padre no muere tan fácil—se ríe tía Emma

•••••••••

—Ya estoy preparando la boda—le cuento a Jasha—. Será magnífica

—¿Cómo puede gustarte preparar eventos así?

—Es nuestra boda Jasha, debe ser genial

—Ya estamos casados, Malysh

—No importa, quiero mi boda—sonrio jugueteando con mi sortija de compromiso. Jamás me cansaría de admirarla—. Oye, ¿Habrá despedida de solteros?—pregunto

—Olvidalo

—¿Por qué?

—No dejaré que nadie te baile.

—Tendre mi despedida de soltera—sonrio

—Malysh

—¿Que?

—Olvidalo

—No, le diré a la encargada para empezar a planificarla

—No tendrás esa estupidez

—La tendré—sonrio. No iba a quitarme esa idea de la cabeza.

•••••••••••

—Hare una despedida de solteras—le aviso a papá en la cena—. Quiero festejar mi termino de soltería antes de casarme

—Hija no creo que sea buena idea—habla papá

—La tendré papá—sonrio

—¿Y que opina Jasha respecto eso?—inquiere mamá

—No quiere que la haga, pero la haré

—Yo te apoyo—habla la tía Zaria

—Zaria—papá le da una mirada severa

—Una despedida de soltera es buena idea—apoya la tía Emma

—Ves papá, la tendré—le sonrió

—¿Puedo ir?—pregunta Bianca

—¡Yo también quiero!—salta Lia

—Ustedes dos no pueden ir a esas fiestas—señala tío Alessio

—¿Por qué?—pregunta Bianca totalmente decepcionada—yo quiero ir. Papi, ¿Puedo?

—No puedes, eres muy pequeña

—¡Tengo diez!

—¡Y yo nueve, tío Hades!

—Son aún pequeñas, los niños no van a esa clase de fiestas—dice mamá

—Que injusto—Bianca se cruza de brazos

—Cuando tengas más de quince podrán ir a todas las fiestas que quieran—les dice Alice

—Solo me quedan cinco años, es muchísimo—suspira dramáticamente Bianca

—Y a mi seis, ¿Podemos ir? Porfis—ambas hacen un puchero

—Que no—hablan mamá, papá, tío Alessio y tía Emma a la vez. Mi hermana pequeña y mi prima suspiran dramáticamente.

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Algo cortito

Empezamos con los preparativos