10

1.3K 173 5
                                    

Yoongi veía de reojo al alfa buscar quien debe que cosas en las estanterías, era una salón de música, no creía que habría juegos de mesa para pasar el rato, a demás lo último que quería es estar junto a ese alfa irritante.

— al parecer no hay nada, bueno... tendremos que pensar en nuestros propios juegos

— no puedo creeelo, ¿acaso eres un niño? Deja de decir estupideces

— tenemos diecisiete años

— somos adolescentes, no niños Jimin — rodó los ojos

— siempre hay un niño interior en cada persona — sonrió — ¡ya se! Juguemos a las escondidas

— ¿dónde crees que nos vamos a esconder? ¿Debajo de las carpetas? — cuestionó molesto

Soltando un suspiro, jaló una silla para estar junto a su omega — oye, alguien vendrá por nosotros, no pongas esa cara

— es la única que tengo — alejó un poco su silla, porque ese tonto alfa se estaba acercando demasiado — además, vivo solo, no creo que en mi casa alguien se preocupe por mi, a menos que los fantasmas con las que convivo vengan y abran la puerta

— ¿vives solo? — se sorprendió — pero-

— no tengo porque darte explicaciones — le aclaró

Jimin tenía muchas dudas sobre Yoongi, ¿cómo que vivía solo?¿dónde estaban sus padres? Y ¿cómo pudo alquilar un lugar siendo menor de edad?

— yo se que no, pero... si tienes razón — no quería entrometerse en su vida, si quería algo con el omega era mejor primero ganarse su confianza.

— ya no aguanto, ¿cuánto tiempo llevamos aquí?

— no lose, quizás una a dos horas — dijo haciendo cálculos

— si tuviera mi celular, hubiera llamado a Namjoon para que me sacara de aquí, ¿acaso ese tonto no se dio cuenta que no llegué a mi casa?

Jimin se puso un poco celoso cuando menciono a ese alfa, odiaba que Namjoon siempre este junto a su hadita. O sea, sabía la atracción que había entre el alfa y su amigo Jin, pero de igual forma no podía evitar ponerse celoso sabiendo que Namjoon era quien podía estar cerca de Yoongi, sin que este sintiera repulsión.

— ah... este... tú y Namjoon, son buenos amigos, ¿no? — con sus dedos hiso trazos invisibles en la mesa.

— es mi mejor amigo — dijo sin prestar atención a la actitud del alfa

— y, alguna vez, bueno... ¿sintieron atracción el uno del otro?

— ¿qué?

— ya sabes, tu eres un omega y el un alfa, quizás en algún momento-

— ¿qué estás insinuando? Crees que entre él y yo, ¿pudo haber algo?

Jimin se alzó de hombros, tenía que descartar cualquier cosa — puede ser ¿no?

— eso a ti no te importa... ahora deja de hablarme que me enerva escuchar tu voz — se levantó de la silla para poder irse más lejos del alfa, no porque quisiera, si no, porque el aroma del alfa lo ponía un poco nervioso. Hierba buena y menta, una embriagante combinación.

Las horas pasaban y Jimin estaba realmente aburrido, jugaba con algunos instrumentos, pero Yoongi le obligaba a callarse, así que para no hacer bulla, sacó su cuaderno y se dispuso a dibujar, no era muy bueno, pero al menos lo entretenía para pasa...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Las horas pasaban y Jimin estaba realmente aburrido, jugaba con algunos instrumentos, pero Yoongi le obligaba a callarse, así que para no hacer bulla, sacó su cuaderno y se dispuso a dibujar, no era muy bueno, pero al menos lo entretenía para pasar el rato.

Cuando terminó su espectacular dibujo, quiso enseñarle a su hadita, pero al momento de girar su cuerpo, lo encontró con su cabeza sobre sus brazos, recostado en la mesa. Se había quedado dormido, se acercó muy despacio y se sentó junto a él.

Se veía tan lindo y adorable, su cabello caía por su frente cubriendo un poco sus ojos. El aroma a café y chocolate, se podía olor perfectamente, era realmente muy dulce.

— ¿qué tengo que hacer para poder enamorarte?

Con su dedo índice le acarició suavemente la mejilla, sabía que si hacía eso estando despierto, terminaría sin mano.

— me gustas mucho Yoongi

Acercó su rostro hasta estar a milímetros de los labios ajenos, podía sentir la apaciguada respiración del omega. Sentía tantas ganas de besar esos delgados labios, pero.... no. No quería que su primer beso sea así, quería que cuando pueda probar esos labios sea cuando el omega este consiente y que ambos lo quisieran, y obvio que él lo anhelaba.

Le dejo un suave beso en la mejilla e imitando la acción, también se quedó dormido admirando la belleza de su omega, porque si, Yoongi seria su omega y haría lo que sea, para que su hadita también guste de él.

MI OMEGA REBELDE.〔Jimsu〕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora