Capítulo 17: Instinto de supervivencia.

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Inspiré profundamente mientras cerraba mis ojos. Iba a entrar en la siguiente prueba, pero si no había avanzado era porque le daba vueltas a lo ocurrido con Kilian. Solo esperaba que consiguiera el nuevo dispositivo antes de que fuera tarde.

Sabía cómo era Kilian, alguien obsesionado y desesperado con los números. Recordaba bien el primer día que nos conocimos.

—¡Hola! ¡Un gusto conocerte! ¡Soy Kilian! ¿Y tú?

Su actitud era la de un crío, aunque tuviera diecinueve años. Vestía con ropas bastante modernas los cuales había dibujos que no reconocía, pero que me parecían muy infantiles. Su sonrisa era propia de alguien que intentaba, de todas las formas posibles, caer bien a alguien.

—Nilia, un gusto.

Di mi mano por cortesía, pero al acercarme Kilian me miró con asombro.

—Un momento, creo que te conozco —comentó, y aquello para mí era empezar con mal pie—. ¿Nilia de la familia Andra?

Suspiré con pesadez.

—La misma —respondí a desgana.

Kilian me miró con atención, cruzando sus brazos.

—Novecientos mil seguidores. ¡Vaya! Aun sin subir videos, te mantienes muy bien —comentó con asombro—. Yo no tengo esa misma suerte.

—¿Y eso? —pregunté con la ceja arqueada.

—A la gente no le interesa los videojuegos a no ser que sea tendencia, pero mira, no me importa por qué es lo que me apasiona y sé que alguna forma encontraré para hacerme conocido —contestó con una sonrisa segura.

De aquella Kilian no llegaba a los cien mil seguidores. Lo que subía en las plataformas no era conocido a no ser que fuera algún juego antiguo y muy moderno. Se declaraba como un coleccionista de juegos inusuales donde jugaba todo tipo de géneros. Terror, acción, aventura, rol, rpg y miles de términos que no comprendía la mayoría.

—¿Videojuegos? —pregunté, cruzando mis brazos.

—¿No sabes lo que son? —Negué ante su pregunta—. Oh, son de lo mejor, aunque muchos digan que es una tontería, pero ¡ja! Gracias a los videojuegos muchas de las cosas han podido ayudar en la salud.

Siempre que Kilian hablaba con orgullo, ponía sus manos en sus caderas como si fuera un tipo de pose heroica.

—Hay juegos que requieren de la mente, pensar, resolver, investigar. Hay juegos que de lo emotivos que son te hacen pensar mucho en las acciones que toma uno o el mensaje que deja que es genial. ¡Y no solo eso! Se ha probado que los videojuegos permiten tener mejor memoria muscular o para que uno pueda pensar la forma en cómo resolver un puzle. ¡Resolución de problemas!

Mi rostro hacia Kilian era de asombro. Hablaba con pasión y se enrollaba un poco, pero no me importaba porque eso en parte lo hacía más vivo que otros swedels.

—Perdón me he pasado —susurró, avergonzado.

—Tranquilo, no me molesta —respondí—. De hecho, me ha despertado cierto interés.

—¿¡De verdad!?

Capaz no debí hablar de más, pues Kilian me agarró por la banda para seguir hablándome de un montón de videojuegos. A veces me hacía comparaciones con ciertos personajes o me recomendaba alguno para que lo probara y viera lo emocionantes que eran.

No los probé. En ese sentido me tenía que disculpar con él, pero admito que algunos tenían unas canciones tan buenas que me dejaban absorta en mi mundo durante horas.

I - Las pruebas de la muerte [G.O] #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora