CAPÍTULO 7

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Entro a la habitación de cuclillas, intento no hacer ruido, termino de abrir la puerta y me doy cuenta de que Scarlette no está en la habitación, así que relajo los pies y termino de entrar tranquila.

Tiro las zapatillas al suelo a un lado de mi cama, abro el grifo de la ducha, me quito la chaqueta, me desabrocho los botones del top, me lo termino de quitar, me bajo la falda y me meto a la ducha, dejando caer todas mis preocupaciones y miedos con el agua.

- Ava, llegué-, dice Scarlette desde el otro lado de la puerta del baño. Entra haciendo mucho ruido, oigo como taconea por toda la habitación, abriendo armarios y cerrándolos con portazos.

Me termino de duchar, me envuelvo en la toalla mientras con el secador me seco el pelo. Scarlette toca la puerta y pregunta si puede entrar, le respondo que sí y entra.

- ¿Dónde estabas querida? -. Me pregunta con curiosidad, mientras enarca una ceja.

- Por ahí, conociendo la ciudad-. Le respondo de manera despreocupada, estoy cansada no tengo ganas de que me dé una charla de chicas.

- Harrison me dijo que te encontró con Justin, parece que no me equivocaba, hay algo entre vosotros dos-. Insinúa, mientras se me acerca más, ahora frunce las dos cejas y sacando morritos continúa diciendo: —sabes, Justin y yo salimos un tiempo, pero luego lo dejamos y decidimos dejarlo como amigos—. No sé qué pretende decirme, pero creo que lo que pasa es que no le está gustando la distancia que estoy cogiendo con Justin.

- Qué insinúas Scarlette-. Le pregunto para ver si es capaz de admitirlo, estoy en cuenta de qué es un poco tóxica.

- Nada-. dice mirando para otro lado, está claro que no quiere que me acerce a él.

- Solo digo que, nos queríamos mucho y rompimos el año pasado así que, si vuelve a buscarme créeme que lo hará, que no te sorprenda-. Su tono es arrogante, con un fondo de chulería. De verdad Scarlette cree que por una ''amenaza'' me voy a alejar de él, la lleva clara.

- Créeme tú a mí, no me alejaré de él, si es eso lo que quieres y si te vuelve a buscar, pues es su decisión, entonces me alejaré y os dejaré vivir tranquilos vuestro supuesto amor-. Río por dentro, todo lo que he dicho es mentira, no me lo creo ni yo, no podría dejar ir a Justin, así como si nada.

Apago el secador lo dejo sobre el lavamanos y fijo la mirada en Scarlette enarcando una ceja, insinuándole que se valla, me tengo que vestir, no hay necesidad de que me vea desnuda.

Deja de desmaquillarse, suspira y sale del baño dando un portazo. Ya estoy conociendo mejor a Scarlette, me está pareciendo la típica que quiere controlar todo y a todos, no me gustan ese tipo de personas así que espero que se relaje conmigo y me deje vivir tranquila, porque si no, no sé si podré soportarla en la misma habitación durante mucho tiempo.

Me termino de poner el pijama y recoger el baño y salgo del baño, Scarlette ya está dormida, no hago mucho ruido, me tapo con el edredón y me acomodo en la cama, hora de dormir.

Estoy derrotada, casi totalmente dormida hasta que me despierta mi móvil empieza a sonar, lo cojo rápido y lo apago, es una llamada de Justin, cuatro llamadas perdidas y ocho mensajes, que coño quiere a esta hora, leo todos sus mensajes en os que escriben:

<< Ava necesito verte de nuevo >>

El último mensaje me lo escribió hace un par de minutos seguirá fuera, pero mi cuerpo no es capaz de moverse estoy demasiado cansada, no lo voy a dejar tirado así que le mando un mensaje en el que escribo << estoy cansada, no saldré>>. Me vuelvo a girar hacia la pared y cierro los ojos.

Otra vez me despierto por un ruido, alguien golpea la puerta con fuerza, son la dos de la mañana, estoy agotada, por qué no me dejan dormir tranquila de una vez, ahora mismo agradecería que Scarlette se despertara y abriese la puerta. Pero no lo hace así que me levanto arrastrando los pies y abro al fin. No me lo puedo creer es Justin, tiene los ojos muy abiertos, el pelo despeinado, lleva unos pantalones cortos y valla, no lleva camiseta, puedo observar perfectamente sus pectorales, sus definidos bíceps y su abdomen, creo que ya no estoy tan cansada.

- Que quieres a estas horas, Justin...-. le digo mientras froto mis ojos. Después de unos segundos puedo abrir más los ojos y acomodarme un poco el pelo, ya no estoy tan despeinada.

- Solo... yo solo quería disculparme por antes, presionarte tanto-. Dice al fin, después de cuatro llamadas, ocho mensajes y tocarme la puerta. No me puedo creer que me haya despertado para esto, aunque sí que le agradezco su disculpa y también le agradezco que haya venido sin camiseta, dios, menudo cuerpo.

Estira el cuello para mirar dentro de la habitación, coje mis llaves de la mesilla que está al lado de la puerta, agarra el mango de la puerta y la cierra, tirándome hacia fuera del pasillo con él.

Me gira poniéndome de espaldas a él, apoyando mi pecho contra la pared, se pega a mí espalda, sus manos apartan mi pelo hacia un lado y me susurra al oído: - Ava, déjame explorar tu cuerpo-. Su voz está más grave que antes, pero delicada. Es atractivo y apasionado... es imposible resistirse a él, es esa persona de las que da igual cuanto mal traiga consigo, no las quieres sacar de tu vida, incluso cuando casi ni le conoces, pero como supe antes, sentí el amor a primera vista, ahora mismo no me importa si cometo un error, quiero saber más de él, explorarle, sentirle cerca de mí. - te espero-. Le susurro yo también.

Me coje de la mano, me guía por los pasillos del edificio hasta que llegamos a un despacho. Mientras caminamos intento no hacer mucho ruido, no quiero que nos pille nadie. Me suena este despacho ya lo he visto antes, es el despacho de la directora Munro, pretende que nos quedemos aquí, no puede ser.

-  ¿Enserio? .

Lleva su dedo hasta mis labios, guardando silencio, lo aparta y me besa, tocándome con sus carnosos y cálidos labios, luego baja sus labios, hasta mi mentón, mi cuello, hasta llegar a la clavícula dejando la huella de sus labios, me agarra de la cintura pegándome más a su cuerpo, no soy capaz de moverme, dejo caer mis brazos mientras que él toma el control sobre mí.

Le beso mientras enredo mis dedos en su pelo, el beso se vuelve rápido y lleno de excitación. Me coge por los muslos y me deja sobre la mesa, mientras curiosea por toda mi espalda hasta mi pecho.

Exploro todo su cuerpo, desde su pecho hasta sus oblicuos y su abdomen, me muero por saber más de él, hasta donde es capaz de llegar.

Mete su mano por dentro de mi pantalón hasta quitármelo por completo. Se quita sus pantalones y los tira por encima de su hombro, nuevamente vuelve a besarme el cuello. Tiro mi camiseta al suelo y me desabrocha el sujetador, sentir el delicioso calor de su piel sobre la mía me complace demasiado.

Me acaricia los pechos con suavidad, me empuja levemente el torso hasta quedarme acostada sobre la mesa. Besa cada parte de mi cuerpo. Nos cuesta separarnos uno del otro. Hay amor, fuego, pasión.

Se separa, el espacio está a oscuras, pero puedo notar la intensidad de su mirada y la figura de su hermoso cuerpo frente al mío. Es como si dudase por si debe seguir o no, pero ya no puede hacerme parar. Nuestros cuerpos desnudos se miran. Me inclino hacia él y le agarro de su espalda hacia mi, hasta que me queda encima nuevamente, nuestra respiración es agitada.

Se separa un segundo de mi, sus labios entrecerrados arden, me acerco y le beso mordiéndole el labio inferior. Pone sus manos sobre mis caderas, acariciándome, suspira levemente. Ambos sentimos el placer.

No puedo parar de pensar en que tal vez no debería estar haciendo esto, somos casi unos desconocidos pero al mismo tiempo es como si ya nos conociéramos, pero ya da igual, ni yo ni nadie puede borrar lo que está pasando ,borrar como aferro mis uñas en su espalda, borrar la forma en la que sus labios acarician los míos, y en como musitan nuestros gemidos en el gran silencio de la noche.

Nuestro destino [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora