𝓒𝓪𝓹𝓲́𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓔𝓲𝓰𝓱𝓽

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Luego de bajar del jet volvimos a la cochera.

-¿y ahora que?- Le pregunté mientras entrabamos.

-Nada. Me voy a recostar, hasta que sane la herida y luego, pensare en inversiones para tu futuro- respondió mientras se echaba el viejo sofá que había ahí.

-¿Como en volver al futuro?-

- ¿Estás loco niño o qué te sucede?- nos observo con gesto de que estaba loco.- Vuelvan a la casa antes de que vuelva mamá, y actúen normal.

Nos quedamos un rato en silencio, luego nos dimos la vuelta para salir de ahí pero antes de emprender camino me di la vuelta y le dije.

- Esto es increíble- le dije con felicidad.

- Lo se niño- me sonrió- apaguen la luz cuando salgan. - Y salimos de ahí.

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{Adam Adulto}

Cuando los dos salieron me quede viendo un rato al techo. Este día había sido muy fuerte para mi. El echo de volver a mi infancia y sobre todo... Ver a T/n en su versión infantil.
Me trajo muchos recuerdos. Recuerdos los cuales aún no pasamos juntos. Era totalmente extraño ver a nuestras versiones pequeñas y saber que estábamos juntos en el futuro.

Saque mi "celular futurista"* para ver una foto de ella en su versión adulta. En verdad la extrañaba.

Suspire para dejar la foto sobre mi pecho e intentar dormir.

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Al llegar entramos por la puerta de la cocina, t/n fue a la nevera y saco dos latas de refresco.
Me tendió una, la tome y abrí con suspiró.

- Bueno... Este día fue interesante- dijo con su mirada pérdida.

- Sin duda- asentí mientras tomaba un trago de refresco. - Bueno, al ya sé cómo me veré en un futuro.- dije con una sonrisa irónica.

- Si. No te vez nada mal- dijo con una pequeña risa. - okey... ¿y ahora que?- preguntó.

- No idea - alce mis hombros- supongo que dormir.- dije no tan convencido, pues no tenía tanto sueño.

- Pues... podemos jugar un rato para que nos de sueño.- propuso, y yo estuve de acuerdo.

Entonces ella dejó la lata en la mesa y sin que pudiera reaccionar me hizo un poco de cosquillas en el cuello antes de salir corriendo.
Lo tome como declaración de guerra y empezó a perseguirla mientras se reía. Se adentró a mi habitación, grave error. Entre y cerré la puerta para que pudiera escapar, sin que pudiera esperarlo me abalancé sobre ella y terminamos encima de mi cama. No lo pensé dos veces cuando empece a atacarla con cosquillas, esta vez no tuve clemencia. Y la dejé ir hasta que ya me había cansado.

Ambos nos sentamos al borde de la cama y por alguna razón nos quedamos viendo a la nada.

- Oye ya tengo sueño- dijo mientras se estiraba un poquito.

- yo también, pero quiero esperar a mamá- le dije con una media sonrisa- Pero si quieres puedes dormir. Traeré la mochila que dejo tu mamá para que puedas cambiarte.- dije esperando su respuesta.

- Gracias - atinó a decir con una sonrisa adormilada.

Me paré y fui al estudio de papá, que ahora era más como una mini bodega. Tome la mochila de t/n del lugar donde mamá había dicho que la puso.
Volví a mi habitación, pero al llegar estaba dormida. Se veía tan tranquila que no pude despertarla, así que, saque una manta de mi armario y la tape con esta.

Salí con cuidado de no hacer ruido y me fui a la sala a esperar a mamá. Esta llegó 10 minutos después.

- ¿Ah hola?- dijo confundida. - ¿qué haces aún despierto?- me pregunto mientras se quedaba parada a lado de la puerta.

- Pues, esta noche estuvo llena de sorpresas- dije mientras acariciaba a Hawking.

- Hay no, ¿qué pasó? -

- ¿Cómo estuvo tu disquetera cita?- le pregunté para desviar el tema mientras me paraba del sofá y caminaba hacia ella. - ¿volverán a salir?

- No. No creo. Tal vez, no lo sé- hablo tartamudeando. En eso unos toques a la puerta hicieron que apartara la mirada y yendo hacia ella para abrirla.

Un tipo que estaba parado ahí la miro con una sonrisa. Le dijo que se había olvidado un pañuelo en su auto, luego me vio y me saludo. Yo camine sonriendo hasta estar al lado de mamá y sella nos presento.

- Hola Adam- dijo con saludando.

- Hola Derek, tienes mucho bello en la barbilla, eso de gustarte- dije intentando incomodarlo.

Mamá se incómodo más y me intento apartar, este empezó a decir que le había agradado el "cumplido" que le había dado. Mamá empezó a cerrar la puerta para que entendiera que ya debía irse.

- ¿Saldremos otro día entonces?- preguntó viendo a mamá pero yo respondí antes que ella.

- Probablemente no, pero hablaré bien de ti Derek- dije sonriendo. Y antes de que se cerrara la puerta por completo lo señalé con advertencia.

- Se ve decente- dije, pero mama estaba con los ojos entrecerrados a modo de acusar, así que pregunté. - ¿Que?

- A veces eres insoportable. ¿Lo sabías?- contestó mientras se iba. Yo me quede ahí parado. Sabia que no había echo bien, pero la verdad no puedo soportar ver a otro sujeto intentando entrar a nuestra vida.

Aún no podía...

- ¿Donde está t/n?- preguntó desde la cocina.

- Se quedó dormida- le respondí mientras me iba a mi habitación. Me sentía mal y lo único que quería era dormir.

Camine hasta llegar a mi habitación, estaba muy cansado como para cambiarme al pijama así que solo me quite los zapatos y me metí bajo la manta. Estaba a nada de dormir cuando sentí como un brazo me abrazaba por la espalda y luego un susurro.

- Para mi no eres insoportable- Susurro t/n mientras acariciaba mi cabello. Se sentía raro. Pero, al mismo tiempo podía sentir como una paz entraba en mi, como si todo lo malo que había pasado hace unos minutos se esfumara.  

Logre musitar un pequeño Gracias en suspiro, y con ella aún abrazándome, mis párpados se fueron cerrando para después hundirme en un profundo sueño.

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{T/n}

Me desperté por un ruido proveniente de la sala. No sabía muy bien que era, así que me paré y fui hasta la puerta. Ahí, vi la escena donde Ellie, Adam y un tipo x en la puerta estaban hablando.

No se de que, por qué no podía escuchar. Pero suponía que ese hombre era la cita de la mamá de Adam.

Después de que este se fuera Ellie reto a Adam con la mirada y después de que Adam le preguntara dijo algo que me dejó desconcertada.

-A veces eres insoportable. ¿Lo sabias?- y dejó A Adam ahí parado. Se veía triste, y puedo entenderlo un poco.

Debe ser difícil tener que aceptar que tu papá ya no está en este mundo y que tu mamá quiera continuar su vida. Pero Adam me había contado lo especial que era su papá para él y cuanto lo amaba, y extrañaba al mismo tiempo.

Me di cuenta de que él venía hacia su habitación así que me volví a meter bajo la manta para que no creyera que era una chismosa o metida.

Cuando entró ni siquiera se quiso cambiar de ropa, solo se acosto. Pude sentir la tristeza en el, así que sin pensarlo mucho me di la vuelta y lo abracé. Le dije que no era insoportable para mi y empecé a acariciar su cabello, eso lo solía calmar cuando tenía un ataque de asma, así que lo intente ahora y parece que funciono. Porque a los pocos minutos ya estaba dormido. Continué las caricias hasta que yo también me quede dormida de nuevo.

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Gracias por leer. <3

𝓣𝓱𝓮 𝓐𝓭𝓪𝓶 𝓟𝓻𝓸𝓳𝓮𝓬𝓽|| Adam y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora