David Rubio: – Por supuesto que tienen que estar presentes, pasen. – Mira a quiénes entraron y después a su hija Ava.
Ava: – Agradezcan que venía con los chicos, porque si no, ahorita les hubiera llegado a todos la noticia de que se fueron al panteón o les dieron un levantón. – Mira a todos quiénes entraron a su habitación.
Javier Meyer: – Ava, te agradecemos por salvarlos a todos, precisamente por eso hemos venido, a decir la verdad.
Antolín: – No se preocupen, saben que Ava es la mejor en armas y en artes marciales, saben que los superó a ti, al señor Kobayashi, al señor Colón, a nuestro abuelo y finalmente a nuestro padre, ella les puede enseñar a los chicos, al igual que yo, ya que yo puedo rastrear a la persona a quién quieras encontrar.
David Rubio: – Eso es cierto, ella aprendió de los meros, meros, pero ahora la alumna superó al maestro. – Mira a su hijo mayor y después a Ava.
Böri Kobayashi: – Sólo enséñales bien, sobre todo a mi hija Keiko. – Mira a Ava y después a Keiko.
Ava: – Por supuesto. – sonríe
Claudio: – Ya hablen. – Mira a todos.
Ava: – Nuestros padres son los narcotraficantes más importantes del mundo. Antón y yo nos enteramos cuando éramos más chicos, esa es la razón por la cual papá y el abuelo pasaban más tiempo conmigo, querían enseñarme bien y por eso me mandó fuera del país junto con Antón para extender el negocio. –
Antón es el Príncipe y yo soy la Reina de la Mafia, nosotros hacemos las entregas y también convencemos a gente para que se unan a nosotros y sean nuestros socios, por supuesto que no es nada fácil, tienes que tener sangre fría para matar gente, sobre todo si son nuestros enemigos. –
Aquí no se tienta el corazón, tener compasión ni piedad por nada ni por nadie más que por los tuyos. Ahora que ya saben del negocio, todos ustedes tienen dos opciones, entrarle y unirse o los desaparecemos y ahora se les ha acabado su vida de príncipes y princesitas primorosas. Así que disfruten el día de hoy, mañana empezaremos con el entrenamiento. –
Claudio, Keiko y Erick: – Miran a sus padres. – ¿Cuándo pensabas decirnos? –
Javier, Böri y Sandro: – Suspiran. – Más adelante, pero como Ava es la Reina de los negocios, ella les enseñará. Otra cosa, como ya los vieron hace rato durante el atentado, les pido que me den sus chips, se los cambiaremos a números privados, no se los den a nadie y traten de no salir solos a alguna parte, salgan con gente de seguridad. –
Machu: – No puedo creer que estés metido en esto. – Mira mal a Javier.
Ava: – Mira Machu, él entró a este mundo porque en esos tiempos no había un trabajo honesto y tenía que sacarlos adelante a ti, a la presumida de tu hermana Toni, Romi y a Claudio, sabes que por este trabajo, tú y tus hermanos se pueden comprar ropa de marca. – Él no quería esto para ustedes, pero era lo único que podía hacer en ese entonces. –
Así que mejor agradézcanles a sus padres y ahora salgan de mi habitación porque quiero descansar, Abel manda traer a mis hombres de seguridad quiénes se encuentran en Ixtapaluca, ellos cuidarán de todos. –
Abel: – Claro que sí, hermana. – Sale de la habitación.
Antolín: – Yo me quedo contigo. – Mira a Ava.
Emi: – Yo también, por si necesitas que te ayudé con tus cosas privadas. – Mira a su cuatrilliza.
Ava: – Bien, los demás salgan. – Mira a los demás. – Mamá, en cuanto esté la comida me hablas porfis. – Mira a su madre.
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Los Descendientes de la Mafia
FanficLos Descendientes de la Mafia cuenta la historia de Ava Rubio quien tiene 5 hermanos más. Ella y sus hermanos León, Ulises, Emilia y Silverio son cuatrillizos. Ellos tienen 17 años; también en el retrato de hermanos se encuentran Abel quien 29 años...