People you know - Lukas Urkijo

30.

Narra Lukas

—Ha pasado tanto tiempo del accidente,  los días no han sido igual desde aquel día, mi vida cambió demasiado sin ti.

Me la paso todos los días viniendo a ver cómo estás, esperando que algún día despiertes y me digas que todo está bien.

Han pasado tantas cosas desde que estas aquí, en el hospital.

Alan regresó a México al enterarse de lo que paso, te viene a ver todos los fines de semana.

¿Ves esa foto de Ian blanco pelón? - señale la pared - es de un vídeo que grabamos para el canal de Fede, y pegamos la foto aquí para que te puedas burlar de él cuando despiertes.

Aparte... te acuerdas que siempre quisiste que tu mamá te diera en adopción y Fede te adoptara?, pues.. Fede firmó unos papeles y ahora es tu tutor, tu papá adoptivo, y cuándo despiertes... vas a vivir en su casa.

Por favor Miri, tienes que despertar, todos te extrañamos demasiado - le dije con lágrimas en los ojos, mientras esperaba alguna respuesta lo cual no sucedió por qué ella no me escuchaba, sigue en coma.

Mis lágrimas se confundían con las palabras, una mezcla de amor, dolor y esperanza que se agolpaba en mi pecho.

—Por favor, Miri, tienes que despertar...- murmuré una vez más, para después levantarme lentamente y salir de la habitación.

Los pasillos del hospital eran totalmente blancos, hay tanto silencio que me da miedo.

—Lukas sigues aquí.. ¿alguna novedad?- dijo Fede mientras colocaba su mano en mi hombro

—Nunca va a despertar... - le dije mientras lo abrazaba y lloraba en silencio

—No puedes perder la esperanza, Lukas. Miranda es fuerte —susurró Fede con voz serena.

Asentí con la cabeza, aunque en lo más profundo de mi ser, la duda seguía acechando. ¿Cuánto tiempo más podría soportar esta agonía, esta incertidumbre que dolía como una espada en mi pecho? ¿Y qué pasaría si el milagro que tanto anhelábamos nunca llegaba?

Daría todo por volver a la noche en que nos conocimos...

Y así pasaron varios días, me la paso en el hospital esperando que algún día despierte la chica de la que me enamoré.

Entre las visitas de todos los chicos, los días en el hospital se llenaron de risas y recuerdos que, aunque amargos por la ausencia de Miranda, nos recordaban los momentos felices que compartíamos juntos. Alan solía traer chistes, mientras Alex improvisaba shows de malabares con objetos que encontraba por la habitación, siempre tratando de arrancar una sonrisa incluso en los momentos más difíciles.

En una ocasión, Alan llegó disfrazado de cucaracha y recitó poesías absurdas para animar a Miranda (aunque no lo escuchara).

El día de ayer Fede organizó una visita especial de mascotas terapéuticas al hospital. Trajo perros adorables y gatos cariñosos que recorrieron los pasillos, brindando consuelo y alegría a los pacientes. Miranda siempre había sido amante de los animales, y aunque no pudo interactuar con ellos directamente, estoy seguro que ella pudo sentir lo mucho que la extrañamos.

El día de hoy, no es la excepción. Espero que hoy por fin despierte... ya lleva 6 meses así...

Y aquí vamos de nuevo... con el corazón latiendo con fuerza en mi pecho, me acerqué a la cama de Miranda y tomé su mano con suavidad. Sus labios estaban pálidos, su respiración apenas perceptible.