Entre sombras y Corazones || Libro 1||

Capítulo 5

-Universidad de Criminología, Chicago- 09:45 a.m-

Nuevamente las clases comenzaron de forma normal. No me sorprendería que vuelvan a suspender las clases por una amenaza de bomba. Sinceramente, no tengo la menor idea del por qué hacen esto. Si es por los períodos de exámenes, no tiene lógica. Después de todo, los exámenes siempre se dan, no importa cuando.

El profesor de Derecho Penal daba la clase como normalmente suele hacerlo. Realmente es una clase interesante. Se conocen las leyes y normas, así como también los delitos y las penas de cada una.
Aquí se analizan los casos reales, sin embargo, debes comprender todo el marco legal en el que se desenvuelve la investigación.

Al principio todo es teórico. Hay que escribir y tomar muchos apuntes para poder entender. Luego de eso vienen las actividades, allí el profesor evalúa si entendiste la consigna. Una vez entendido la consigna, tienes la oportunidad de poder salir a investigar casos recientes.

En fin.

Desvié la mirada al asiento vacío que estaba a mi lado. Andrea lleva sin venir desde hace un mes. Me parece realmente extraño, ya que ella no es de faltar a clases durante mucho tiempo. Traté de comunicarme con ella, pero mis mensajes no le llegan, y mis llamadas quedan en el buzón de voz.
Hablé con Cristopher, su hermano mayor, y dijo que no sabía nada de ella. A decir verdad, él nunca está en la casa, trabaja doble turno la estación de bomberos. No entiendo cómo es que tiene tanto tiempo para seguir con los estudios.

Aunque, es bueno que siga estudiando..

Esta tarde iré a su casa. Necesito saber si está bien, o si le pasó algo. Solamente espero que no le haya pasado nada grave como para aumentarse así de repente.

————

— Blair.. ¿Me estás escuchando? —

Katerine chasqueó sus dedos frente a mí. Volví a la realidad después de estar.. no sé cuánto tiempo estuve fuera de mí.

— No, lo siento.. ¿Qué decías? —

Sonreí de forma torcida. Katerine rodó los ojos y suspiró profundamente.

— Te decía, que al lado de mi casa, se mudo una familia.. —

Alcé una ceja, confundida.

— ¿Y..? —

— Que son algo raros. Es decir.. durante la madrugada se escuchan gritos de la mujer. Mientras que los infantes guardan silencio.. —

Un escalofrío recorrió mi espalda baja. Tragué saliva. Estas cosas así me dan mala vibra.. sobre todo si se trata de una familia, y los infantes son apenas unas pequeñas criaturas.

— ¿De verdad? ¿Cuántos niños son? —

Katerine se quedó en silencio unos pocos minutos.

— Son dos. Dos niños, aparentemente de tres y seis años.. —

Cerré los ojos y dejé que mi espalda descanse sobre la banca.

— Veré qué puedo hacer.. no te preocupes.. solamente te voy a pedir un favor.. ¿Puedes? —

— Por supuesto, has hecho muchas cosas por mí, así que si.. ¿Qué quieres qué haga? —

Pensé unos minutos y suspiré.

— Intenta hablar con los niños. Si es que los llevas a ver. Y en caso que sí, observa si tienen señal de peligro.. —