—Dianna—alzo mi vista cuando Charlie me llama.
—¿Sucede algo?—cuestiono con una sonrisa, el niega tranquilo.
—Tu ultimo paciente se fue hace veinte minutos, debes de volver a casa—recuerda.
Suspiro cansada, me pongo de pie y con ayuda de Charlie me quito la bata.
—¿Quieres venir a cenar?—ofrezco amable.
—No, mientras este lejos del demonio mayor, mejor—lo empujo levemente.
—No seas grosero, no te dejare pasar a mi casa nunca mas—finjo estar molesta.
—Solo bromeo—aclara cerrando la clínica—sabes que a pesar de todo amo la comida de tu esposo—niego divertida.
—Bueno pero tendrás que acompañarme al super por leche—el asiente y ambos empezamos a caminar.
—No entiendo porque caminamos si tu espeso te ha comprado tres autos—reniega y yo ruedo mis ojos.
—Caminar es mas sano—miento.
—Aun no aprendes a manejar, ¿Cierto?
—Lo estoy intentando.
Ambos entramos a la tienda y comienzo a tomar la leche y un par de cosas mas que faltaban en la casa, Charlie se había perdido por los pasillos mas a los minutos vuelve emocionado.
—¿Puedo llevarlo?—muestra un juego de mesa.
—No—suelto seria mientras sigo con mis compras.
—Eres una aburrida, te odiara en el futuro—aseguro.
—No lo creo—suspiro cuando salimos de la tienda, la casa se encontraba en un área privada y exclusivo por lo cual no tuvimos problemas con los fotógrafos.
Subimos con tranquilidad por el elevador, solo ansiaba llegar a casa, cenar, tomar un baño y dormir.
—Llegamos a tu hogar, dulce...
Charlie y yo nos quedamos callados cuando al entrar vemos la sala llena de juguetes, ropa y muchas otras cosas.
—¡Mami!—suelto un grito cuando Sunny se abraza a mi pierna.
—¿Que le paso a tu cabello?—cuestiono perpleja al ver que el lindo y largo cabello de mi hija ahora estaba mal cortado.
—Papi me dio goma de mascar y se pego por accidente en mi cabello y yo lo corte—dice feliz, ella alza sus brazos para que la cargue y lo hago,
—¿Y tu papi?—pregunto tratando de ocultar mi molestia.
Charlie reía fuertemente mientras se sentaba en el sillón.
—Esta con mi hermanito.
—Sabia que era mala idea volver al trabajo—dejo la bolsa de leche en polvo en la mesa y antes de buscar a Lee Dong Wook el sale de la habitación, su ropa estaba arrugada al igual que su cabello, tenia pintada la cara y lucia cansado y preocupado, al ver traga fuertemente.
—Hola cariño—susurra nervioso.
—Sunny, linda—ella deja de jugar con mi cabello y me mira—ve a jugar con tío, ¿Si?—ella asiente feliz, la bajo de mis brazos y sale corriendo en dirección a Charlie esta comienza a juntar sus juguetes para después peinar su cabello.—Tu—lo señalo—dame a mi hijo—ordeno, el se acerca a mi y deja en mis manos al bebe de un año.
—Y-yo...
—¿Por que dejaste que nuestra hija de seis años se cortara el cabello, sola?—pregunto molesta.
—Fui a cambiar el pañal de Taeju y cuando volví ya lo había hecho—explica abrumado.
—Tu papi es un tonto—chilla Charlie con burla.
—¡No lo es!—chillo Sunny molesta.
—Lo es linda.
—¡No!—grito empezando a llorar, algo que pasaba con mis hijos era que si Taeju escuchaba a su hermana mayor llorar el también lo hacia.
—Charlie, largo—hablo molesta.
—Pero...
—¡Largo!—exclamo tratando de calmar al mas pequeño.
El obedece y sale del departamento.
—Tu ordena esto mientras yo duermo a Taeju y tranquilizo a Sunny y mas te vale que lo hagas rápido porque tenemos que llevar a Sunny a dormir—el asiente repetitivamente.
—Si cariño—deja un beso en mi frente antes de comenzar a limpiar.
—Sunny, nena—la llamo, ella limpia su rostro con sus manitas y se acerca corriendo hacia mi—vamos a llevar a tu hermano a dormir ¿Si?—extiendo mi mano y ella la toma.
Entro a la habitación que compartía con mi esposo y dejo a Taeju en su cuna, la muevo suavemente y a los minutos sus ojitos se cierran.
—Hasta mañana, Tata—susurra Sunny.
Las dos salimos del cuatro y ahora entramos al cuarto de la mayor, ahí ya estaba Lee Dong esperándonos.
—Papi—chilla ella lanzándose a los brazos de sus padre, el comienza cepillar lo que ahora era un cabello corto y desalineado.
—Eres una niña de papi—sonrió feliz.
—Soy la favorita de mi papi—asegura abrazándose a el.
—Por supuesto, eres mi hija favorita—esta sonríe—y Taeju es mi hijo favorito—niego divertida.
—Hoy me contaran la historia de su boda—pide sin entender lo que su padre dijo.
—Esa historia será para otro día—respondo dejando un beso en su frente—hoy descanse.
—Los amo, son los mejores papis del mundo.
—Te amo, Sunny—Lee Dong acaricia su cabeza.
Suspiro cuando salgo de la habitación de Sunny.
—Por fin, unos momentos a solas—Lee Dong se acerca a mi y me sostiene de la cintura para después besarme, el me guía a la sala mas se detiene—¿Cansada?—susurra.
—¿También lo estas?—pregunto.
—Mucho—admite.
—Solo vamos a dormir—pido evitando reír—ya no tienes la misma energía que hace seis años—me burlo, el me mira ofendido.
—¿Me estas retando?—niego rápidamente.
—No, solo vamos a descansar—pido—tendrás mas tiempo mañana.
Camino hacia mi cama peor me detengo al no escuchar sus pisadas detrás de mi.
—¿Que?—cuestiono confusa al ver como sonríe tontamente.
—Gracias por darme una familia, te amo.
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SCHOOL AND FLASHES~Lee Dong Wook
FanfictionDónde Dianna y su mejor amiga obtiene una beca para estudiar en Seúl y por accidente conoce a Lee Dong Wook