MEGAN
La verdad no fui muy consciente de mis palabras en la conversación que tuve con Tom, es claro que lo amo ustedes lo saben más que nadie.
Nunca pensé que estuviera comprometido, aunque no se le ve muy emocionado, muero por conocer a su prometido no entiendo porque no le cae bien a Bill.
Después de tener aquella platica Bill decidió llevarse a Tom a su habitación, tenía que hacer que se relajara ya que se encontraba muy estresado, después de un rato Bill volvió a mi habitación acompañado de Georg y Gustav, ambos se pusieron muy felices al verme, igual que yo al verlos a ellos.
Se que a la mayoría de ustedes no les gusta mucho las partes series, ósea aquellas partes que sobre sentimientos u opiniones, por ello pasemos a la parte divertida.
—!!MIERDA ESTÚPIDA!!—Gritaba una y otra vez Bill.—!!BAJENME DE ESTA PUTA MIERDA!!—
Nos encontramos en un parque de diversiones, Bill y yo decidimos montarnos en una montaña rusa mientras llegaban Georg, Gus y Tom.
Después de un rato de sufrimiento por fin se había terminado la atracción, por lo que rápidamente Bill comenzó a correr hacia al baño ya que tenía muchas ganas de vomitar.
Mientras yo esperaba me senté en una pequeña banca en forma de corazón.
—Hola, que haces aquí solo.—Me volteé hacia la derecha encontrándome con Tom, quien se sentó junto a mi.
—Estoy esperando a Bill.—Respondió.
—Ya empezaron sin nosotros—Se indignó.
—Bill estuvo insistiendo, y al final quedó arrepentido de haber empezado tan rápido.—Reí en bajo, recordando como Bill rogaba por subirnos a la montaña rusa.—Donde están los demás.—Pregunté.
—Dijeron que ya llegan, queres tome algo.—Pregunto, lo pensé por un rato pero al final acepté.
Mientras caminamos hacia algún puesto de bebidas nos topamos con una cabina de fotografías, y yo soy súper fan a esto.
—Dios mío, tenemos que entrar allí.—Agarre la mano de Tom y comencé a correr hacia la cabina.
Rápidamente entramos en ella, Tom tímidamente se sentó allí mientras yo intentaba encender la máquina.
—!!Enciendeee!!—Le di un golpe y encendió.—Por fin.—Sonreí y me senté junto a Tom, teníamos 20 segundos fijos para decidir una pose.
El miro a la cámara y sonrió, enchinando sus ojitos, me incliné un poco hacia su hombro y sonreí sin mostrar mis dientes.
Minutos después la foto fue imprimida, no solo una si no dos, al agarrarla, el cogio una y se la guardo en el bolsillo de su pantalón, yo cogi la otra y también la guarde.
Después de salir de allí guiemos a buscar a Bill, quien ya se encontraba con Gus y Georg.
Nos acercamos a ellos y los saludamos.
—Que hacían ustedes dos juntos.—Pregunto Georg.
Tom y yo nos miramos y sonreímos el uno al otro.
—Solo fuimos a caminar.—Respondió Tom.
—Uy si claro.—Exclamó Bill.—Dios mío me siento terrible, jamás en mi vida volveré a subirme a una mierda de esas.—Se quejó.
