Capitulo 11

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ALAIA

Por un momento creí que el entrenamiento para ser hechicera sería algo mucho más fácil pero que equivocada estaba, a pesar de tener conocimiento sobre la naturaleza que era mi fortaleza en el cielo, tenía que aprender a conectarme con la madre tierra, con el viento, con el agua y sobre todo con el fuego, que de ahora en adelante seria mi aleado.

Es bastante el agotamiento físico como mental, los ángeles caídos que habitan en el inframundo me estuvieron ensenando a como pelear como un demonio ya que solíamos ser bastante dóciles como ángeles, pero no era lo mismo yo ya no era un ángel, tenía que aprender a defenderme como tal como un demonio, porque no serían nada fáciles las batallas de ahora en adelante.

Hécate me dijo que tenía que elegir a un familiar, me explico que un familiar es un gatito que casi siempre ellos te eligen a ti, a nosotras las brujas o hechiceras ellos nos cuidan o nos ayudan a convertirnos en ellos para evitar cualquier peligro, porque a vemos brujas de todo tipo ya sean buenas o malas de magia blanca o negra.

Y bueno yo soy de ambas así como puedo curar, también puedo dañar es un gran don por ello me convertí en una gran hechicera, gracias a las enseñanza de Hécate, Agatha y también a Belcebú.

He ido a ver a Kaia pero no físicamente, ellas me ensenaron que puedo convertirme en lo que quiera ya sea en una hermosa mariposa o en un gusano rastrero, puedo ir desde lo más inmenso hasta lo más pequeño e insignificante.

Por fin Agatha me acaba de dar la noticia de que estoy lista y puedo ir al mundo mundano, físicamente, que puedo ir siempre y cuando regrese cuando ellas me llamen ya que nos escuchamos telepáticamente podemos hablar sin que alguien nos descubra.

Le tenía que enviar una carta a mi pequeña aún que no le diría que ya puedo ir quiero llegar sin que me espere, que sea una gran sorpresa, sé que ella como yo desea poder vernos.

Mandé a traer a Eros y le dije que viniera para poder llevarle la carta a Kaia, le dije que por ningún motivo podía decirle nada todavía, aunque me enojaba tener que estar en contacto con él y sobre todo confiarle a él el bienestar de la personita a la que más quiero en este mundo, pero aun así me hizo un favor en hacerla su hermana ya que eso de que fuese totalmente humana no lograría acercarme a ella.

Ya se llevaban un poco mejor, su relación entre él y Kaia era como si realmente fuesen hermanos, Eros estaba viviendo con ella para poder cuidarla de cualquier problema y de sí misma, que era lo que más nos preocupaba.

Lo pensé mucho y decidí que iría el día del aniversario de su restaurante creo que sería un gran regalo y quería estar con ella en un día tan especial para ella, estaba contenta por su logro a pesar de todos los que le decían que no podría ella lo logro, estoy muy orgullosa de ella de todo lo que ha logrado, realmente estaba muy nerviosa por poder verla.

La última vez que la vi fue hace más de un año cuando me salvó y ayudo a curar me, pero desde el minuto uno tuvimos una gran conexión, desde ese día hasta ahora nos podíamos contactar con las cartas, gracias a esas cartas nos conocimos mucho mejor pudimos saber que nos gusta una y a la otra.

Eros me hizo un gran favor en protegerla de ella misma ya que con cualquier cosa podíamos alterar el curso de su verdadera fuerza, Agatha me dijo que era irreversible si ella llegara a conectar con su bestia interior se convertiría en un demonio sin corazón y no habría vuelta atrás.

Kaia se convertiría un ser sumamente poderoso sería implacable, que nadie volviera a hacer la menos, tendría el poder de hacer cenizas a sus enemigo, y se volvería un demonio en cuerpo de humano y no creía que seguiría siendo ella misma.

Había llegado el día hice los preparativos para irme, HECATE también estaba conmigo así como Agatha, Ares y Apolo.

Dijeron que no puedo llegar en mi forma de hechicera por qué esa fase no la conoce ella y podría sorprender se tengo que ir en forma de humana.

-¿Humana? como, como humana no los entiendo-los mire confundida.

-si mi pequeña, tendrás que ir sin tus alas y cambiar tu vestimenta, cuando le digas a Kaia lo que eres ya podrás mostrarle tu verdadero ser, antes no aunque ya lo sabe por las cartas pero no te ha visto y para no alterarla será mejor así mi niña – me explico Hécate.

-Está bien, entiendo ahora necesito conseguir algo apropiado para la ocasión, tengo que ir sumamente linda para ver a Kaia-

-Toma Alaia, Eros encontró este vestido Kaia le dijo que se te vería hermoso-Ares saco un vestido negro sumamente hermoso.

-En verdad Ares, está precioso, mi niña siempre pensando en mi-.

-Así es Alaia, Kaia siempre está pensando en ti, ahora vamos arréglate por que se nos hace tarde-.

-¿Se nos hace tarde? me huele a manada si solo iré yo- me puse reír.

-Sí, se nos hace tarde porque también iré yo-

-Ares tu no aprendes verdad te recuerdo que por eso tú también estas aquí-

-jejeje lo sé pero Eros me dijo que el mundo de los humanos es muy tranquilo y también quiero divertirme-

-Hash tu nunca cambias, entonces me iré arreglar, y tu as lo mismo-.

-Lo vez te convencí jejeje-

-Cállate y no tardes como siempre-me dio la espalda y saco la lengua es un inmaduro-

- Ares hablo enserio, no tardes-

Él se fue a cambiar y yo por igual, me puse el vestido que Kaia eligió para mí, es realmente hermoso, me solté el cabello y me puse un poco de tinta como si fuese labial rojo me veía increíble, salí del palacio Hécate y Agatha ya me estaban esperando.

Estuvimos hablando un momento en lo que Ares estaba listo, se tardaba mucho arreglando, por fin salió se tardó más de dos horas solo para ponerse un traje negro, en fin ya estábamos listos era momento de irnos.

Nos despedimos de Hécate, Agatha y Apolo, nos despidieron muy felices, nosotros también realmente lo estábamos, bueno yo por volver a ver a Kaia y Eros por salir de aquí.

Hemos llegamos en el momento en que Kaia estaba dando el discurso del aniversario, se ve totalmente hermosa ese vestido rojo le queda increíble hace juego con su cabello negro, no le dio ninguna pena salir y hablar enfrente de la gente, poco a poco iba resolviendo sus miedos.

Todos le aplaudieron aun no lograba verme, así que Eros me dijo que ira a la cocina a dar órdenes ese era el momento preciso para poder presentarme.

Cuando me vio se quedó helada no sabía ni que decirme, solo se me quedo viendo como yo a ella, se me acerco poco a poco.

-Hola mi señorita-

-Hola mi niña-

No me dijo nada más me abrazo y se puso a llorar estamos tan emocionadas de poder vernos, se quedó sorprendida cuando vio junto a mí a Ares.

MOON FLOWERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora