Capítulo 16

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—Entonces, a ver si entendí, básicamente estás casi alucinando y pegado al techo, por una mamada.

— ¡Jimin no seas tan vulgar! No es sólo eso. Fue algo especial. Yo no lo esperaba.

—Perdona... No sabía que te habías vuelto tan sensible... Pero Jungkook no es que fuera tu primera vez teniendo sexo...

Realmente era difícil para Jungkook que su amigo entendiera el cúmulo de emociones que estaba experimentando. Si lo veía desde un punto de vista frío e impersonal, probablemente lo sucedido la noche anterior no debería ser calificado "como el mejor sexo de su vida", aun cuando Seokjin tenía una boca caliente y una lengua experta, pero había tenido un significado para él. Y sabía que para su vecino tampoco había sido fácil. Es cierto sólo había sido una corta y rica mamada, pero él esperaba que fuera el comienzo de una nueva etapa en su relación.

—Quiero profundizar nuestra relación. Hasta ahora él dijo que quería ir despacio... Pero esta mañana me ha insinuado que iremos más allá y eso me emociona. Deseo a ese hombre, quiero sentirlo dentro de mí, sentir dolor, placer, todo lo que pueda tomar de él.

— ¡Ay amigo! Sí que estas jodidamente enamorado...

Jungkook sonrió y asintió. Estaba enamorado, muy enamorado.

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Seokjin subía rápidamente a su auto. Debía ir a casa, preparar a Jihoon y su bolso, ducharse y verse "más juvenil", en palabras de su amigo Sandeul.

Jungkook le había estado enviando varios mensajes que lo tenían al borde del precipicio. No había imaginado que su tímido y vergonzoso vecino de hace unos meses pudiera escribir palabras tan ardientes que encendiera así sus sentidos. Estaba nervioso, tal vez él no podría en una noche darle todo lo que un joven y apasionado chico de 23 años esperaba.

Se preparó, se puso los lentes de contacto y vistió con unos jeans rasgados negros y una camisa de seda que transparentaba más de lo que hubiese deseado. Una chaqueta negra completaba el atuendo "juvenil" que esperaba que su amigo aprobara. Pero lo que más deseaba era que a Jungkook le agradara. La señora Ming lo ayudó con el bebé al verlo tan atolondrado y nervioso.

Cuando llegó a la casa de Sandeul, éste lo recibió con un elocuente "¡WOW! que al parecer significaba un alto grado de aprobación. Juntos partieron a la casa de al lado, la casa de sus padres. Fue su propia madre quien abrió la puerta y se sorprendió de ver a su hijo vestido así.

—Madre...

—Seokjin, hijo te ves tan guapo. ¿Sólo serán Jung-Hwan y tú?

—En realidad, madre, iremos a un bar donde mi novio Jungkook toca con su banda.

La mujer hizo una mueca y llevó adentro a Jihoon. Seokjin la siguió.

—Madre, tendrás que aceptar mi relación con Jungkook si quieres seguir viéndonos.

—Eso es manipulación Seokjin...

—Lo aprendí de la mejor...

La señora Kim ya había discutido temprano con su esposo y no quería seguir ahora con su hijo.

—Está bien. Vengan mañana tú y ese chico a almorzar. Le daré una oportunidad

—Y te disculparás con él...

Estaba atrapada. Amaba a su familia y si hasta ahora había aceptado cada decisión de su hijo, tal vez no era el momento para dejar de hacerlo.

Seokjin manejaba hacia el bar, con una sonrisa de satisfacción. Había pensado que todo sería más tormentoso con sus padres, pero no había sido así.

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