. . Kim Hyo-ri estaba enamorada de un chico, sabiendo que aún así le daba mal, solo se lastimaba.. su cupido era tan tonto ya que nunca le había tocado un buen chico..
. Cupid is so dumb
- Hecho con el fin de entretener, no busco...
Después de ver a Johnny besar a otra chica dolió, se suponía que no debía importarme aquella cosas porque no eramos nada más que amigos, pero yo si sentía algo por el... mucho más que una amistad.
Ahora empece a caminar sin rumbo, ni siquiera sabía dónde estaba ¿Llamaría a mi mamá? ¿Un taxi? ¿A alguien? Era lo que menos me importaba en ese momento. Me senté en una banca a llorar, era lo que podía hacer hasta que alguien hablo detrás mio.
—Es noche y hace frío, deberías abrigarte. —Puso un suéter sobre mis hombros.
Voltee a ver detrás mio para encontrarme con esos ojos.. era Sunghoon.
Sentí un deja vu, no sabía porque pero sentía que esa situación ya la había vivido antes.
—¿Sunghoon? —Lo mire sorprendida.
—¿Por qué lloras? —Sunghoon se sentó a un lado mio.
—Ah... no es importante. —mire al frente
—Mírame. —Dijo buscando mi mirada y lo mire. —¿Quién te hizo llorar así? —limpio mis lágrimas.
—Yo.. —trate de controlarme y no romper en llanto.
—Esta bien.. —me abrazo y volvi a romper en llanto. —¿Fue Johnny? —asenti.
—Que idiota. —suspiro.
Después de unos minutos me separe del abrazo y me limpie las lágrimas.
—Te llevare a tu casa. —se levanto y luego me levante yo. —Por ahí esta mi auto. —caminamos hacia el y luego nos subimos a el.
—Muchas gracias Sunghoon, por todo. —le sonreí.
—No tienes el porqué agradecer. —sin nadamas que decir arranco el carro.
Pensé el camino seria incomodo pero no fue así, Sunghoon puso algunas canciones, en esas se encontraba una nueva, y al parecer empezaba a ser muy reconocida ( Cupid - Fifty Fifty ) a mi en lo personal me gustaba demasiado, y no solo por el ritmo, si no también por la letra.
—¿Te gusta esa canción? —me miró.
—¿Cómo sabes? —Lo mire con una sonrisa. El estar con Sunghoon me había funcionado para olvidar lo que había pasado. —Me gusta mucho por su letra, por que definitivamente soy yo.
—Es una linda canción. —volvió si mirada al frente.
—Por cierto, Sunghoon, ¿Quién te enseñó a manejar? —pregunté.
—Ah, fue mi padre.
—Ohhh
El resto del camino fue en silencioso. Después de unos minutos llegamos a mi casa, me despedí de él y entre a mi habitación. Claro, ya no tenía más lágrimas que soltar, el ya no iba a ser un problema para mi, lo olvidaría y ya no pensaría más en el.
- SEMANAS DESPUÉS -
Johnny me mandaba mensajes cada día pero a mi seguía sin importarme.
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